Miguel Sánchez Flores, médico veterinario, expone en Gramse Ganadería Eficiente, que este es un enemigo silencioso porque va a generar pérdidas de dinero en el ganadero y, además, va en contra de los lineamientos de bienestar animal porque los animales “no van a estar cómodos, atascados y no tendrán mucho confort”.

Para el caso de la producción de cría o engorde de animales, el lodo incide en la falta de bienestar animal, pues a los bovinos “hay que darles el mayor confort posible para que estos tengan una buena conversión alimenticia y para que no estén perdiendo peso, y obvio para que los ganaderos no pierdan dinero”, dice Sánchez Flores.

Uno de los puntos claros que menciona el experto es que, el momento en el que realmente se pueden tener problemas con el lodo, es cuando este sobrepasa la pezuña de los animales, que es cuando se dice que no hay bienestar animal.

“En ese momento tenemos problemas de perder peso en los animales y también inconvenientes con pododermatitis e infecciones de las patas en los bovinos. Esta pododermatitis provoca que nos bovinos no estén ganando peso, que no conviertan bien el alimento en carne”, detalla Sánchez Flores. (Lea en CONtexto ganadero: Tome las precauciones necesarias para evitar la pododermatitis en su hato )

Para el profesional, además de las consecuencias mencionadas, la pododermatisis también genera que el productor tenga que invertir en el tratamiento de los animales, que implica la consulta con un profesional, la compra y aplicación de analgésicos y antibióticos que necesita el bovino para una mejoría de su salud.

Entonces, para ser más claros, estas son las consecuencias directas del exceso de barro en su finca:

1. Bajas en las ganancias diarias de peso: Según Sánchez Flores, no se tendrán las ganancias deseadas porque, por ejemplo, “un animal que ya está en finalización del proceso de engorde, a lo mejor va a ganar dos kilogramos al día, pero si está en un corral con mucho lodo, probablemente no va a ganar ese pesaje, sino que disminuirá de un 30 a un 50% en ganancia diaria de peso.

2. Mala conversión alimenticia: De acuerdo con el profesional, un ejemplo de esto es que “un animal que normalmente en un corral sin lodo necesita 6 kg de alimento para ganar 1 kg de carne, pero en un corral con lodo va a necesitar mucho más alimento para hacer ese mismo proceso”.

Esto estará representando pérdidas económicas, pues el alimento es uno de los insumos más costosos en un proceso de engorde de bovinos.

3. Más días en el corral de engorde: Esto quiere decir que cuando suceden los puntos mencionados anteriormente, el productor se ve en la necesidad de dejar a los animales mucho más tiempo en los corrales para lograr el objetivo de kilogramos deseados, lo cual puede traer como consecuencia algunas pérdidas económicas. (Lea en CONtexto ganadero: Aprenda a controlar la presencia de barro en los establos )