A propósito de la alerta lanzada por ganaderos de Trinidad (Casanare) sobre la proliferación de casos de patologías por estos agentes, profesionales y expertos como Antonio Betancourt, PhD en Parasitología, expresaron su preocupación por la falta de atención y de soluciones para los productores. En la noticia publicada en CONtexto ganadero, los productores del municipio en los Llanos orientales se mostraron alarmados por el enflaquecimiento y la muerte de varios de sus bovinos, que atribuyeron a hemoparásitos causantes de anaplasmosis o tripanosomosis. Para el doctor en Parasitología, los signos descritos dan cuenta de un posible cuadro de tripanosoma, muy común en las zonas tropicales de nuestro país, como en esta zona de la Orinoquía. (Lea: Ganaderos en Casanare, preocupados por posibles casos de anaplasmosis) “Para mí es más probable que sea esta y no anaplasmosis, precisamente por el enflaquecimiento progresivo. Hay animales que van perdiendo peso cada vez más, llegando incluso al estado de caquexia, que es muy típico de la tripanosomosis”, señaló. Betancourt lamentó que los productores no tengan más detalles del hemoparásito que específicamente está atacando a sus bovinos y reclamó mayor atención para lograr un análisis más certero que les permita emprender acciones de tratamiento y prevención. “Las redes de centro de diagnóstico del ICA a nivel regional no tienen una tecnología para un diagnóstico molecular, pero sí valdría la pena un apoyo en el diagnóstico parasitológico directo”, precisó. (Lea: ¿Cómo combate MSD las enfermedades ante el cambio climático?) El experto se desempeñó durante varios años como funcionario del ICA, y si bien reconoció que no conoce la situación actual de la entidad, sostuvo que es necesario prestar atención a otras enfermedades distintas a las de control oficial (fiebre aftosa, brucelosis, rabia, entre otras). “Eso deja por fuera a las enfermedades que son frecuentes y pueden ser devastadoras para la ganadería de una zona, y que no se están diagnosticando con suficiente vigilancia. Yo sé que en los centros diagnósticos locales o regionales deben enviar las muestras de histopatología a Bogotá, lo que toma un tiempo más largo, y cuando contestan, los animales ya están muertos”, indicó. En efecto, uno de los reclamos del médico veterinario que estaba atento a los casos en Trinidad, Jefferson Amaya, afirmó que no enviaban las muestras al ICA por la demora en las respuestas. (Lea: Preocupación en el Valle del Cauca por casos de tripanosoma en bovinos) En abril de este año, en el Valle del Cauca ocurrió una situación similar, donde un gran número de semovientes también se vieron afectados por la tripanosomosis. El médico veterinario Javier Alfonso Largo contó que sí enviaron las pruebas al ICA, pero no hubo acciones efectivas de parte de la entidad. Así se expresó Betancourt: “Yo pienso que falta mucho apoyo, un diagnóstico certero de la enfermedad. Hay métodos que se llaman parasitológicos, que no son del otro mundo y que se pueden hacer inclusive a nivel local o regional, con un buen microscopio y un buen colorante”. Desde su posesión, el ministro de Agricultura Andrés Valencia anunció que haría reformas al ICA para que se dedique únicamente a la sanidad animal y vegetal del país. Aunque no es una referencia a los casos como los de Casanare y Valle del Cauca, la intención del actual Gobierno podría desembocar en un mayor enfoque a estas enfermedades.