Desde el mismo momento que un animal nace se debe identificar perfectamente con su peso, lo que permite dar inicio al seguimiento productivo y podrá ser relacionado con los padres para toma de decisiones, incluso de tipo reproductivo y genético.

Es necesario medir el peso de los animales desde el momento del nacimiento ya que este registro servirá para decidir sobre los mejores toros y madres, indicó Ricardo Arenas, médico veterinario especialista, en un nuevo capítulo del Manual Práctico Ganadero elaborado por la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán), donde indicó que el peso del animal al nacimiento depende de la raza y pesos bajos, generalmente, se acompañan de problemas sanitarios; y, pesos muy altos se relacionan con dificultades al parto.

Esta práctica es aún más importante cuando se habla de lecherías especializadas pues la selección de las hembras de remplazo debe tener la mayor cantidad de información. Mientras que, en ganadería de cría, tipo carne, el peso al nacimiento no es muy usado, aunque tendría un valor técnico al momento de revisar los reproductores y las facilidades de parto.

Herramientas para el pesaje

Para llevar el registro del peso se cuenta con dos alternativas de medición. La primera es la báscula que es la más confiable y existen las portátiles que son muy prácticas para esta etapa de producción, aunque para animales adultos no lo son tanto. (Lea: Peso de las vacas, indicador esencial en la reproducción del ganado bovino)

La segunda es la cinta métrica que da una buena aproximación, principalmente en animales de levante y ceba que ya están formados y sus dimensiones corporales conformadas. Es importante tener cuidado de usar la escala de medición según sea la raza pues existe variabilidad entre los animales indicus y Taurus e incluso el tamaño adulto de las diferentes razas.

Al momento de realizar el pesaje con la cinta es muy importante colocarla adecuadamente y asegurarse de parar muy bien al animal aplomándolo correctamente. Esto se dificulta cuando su uso se realiza en animales poco dóciles.

Dependiendo de la especialización de la producción, los pesajes de los animales en proceso de crianza se realizan cada mes, o en algunas explotaciones solamente se realizan dos pesajes: uno al nacimiento y otro al destete del animal.

Así mismo, los pesos al destete tienen gran importancia ya que permiten calcular ganancia de peso que para hembras de remplazo es importante y que no sean demasiado altas, evitando la acumulación de grasa en glándulas mamarias y en el aparato reproductor. Esta recomendación aplica tanto para el periodo de cría como para el de levante.

El peso de destete para las terneras de remplazo en razas lecheras de tamaño grande debe ser entre 120 y 130 kilos, y, en razas pequeñas como el jersey, podrían estar entre 90 y 100 kilos. En ganadería de cría tipo carne los animales al momento del destete deben estar en 190 kilos las hembras y 210 para machos. (Lea: Aprenda a calcular la ganancia diaria de peso en bovinos)

Esta información permitirá ir evaluando la ganancia de peso obtenida durante la crianza, ajustar periódicamente las dietas, así como identificar a las crías que deben ser vigiladas y recibir algún tratamiento adicional.

Cuando los lotes sin numerosos, el control de peso ayuda a distribuir los animales en grupos homogéneos facilitando su manejo. En el archivo de información se debe anotar la fecha de cada pesaje y el grupo de animales que se está evaluando y la identificación exacta de cada animal.

Al hacer los análisis técnicos de estos pesajes es indispensable tener la información de edad y dieta de cada animal. Al encontrar bajos aumentos de peso es necesario revisar la condición corporal y el pelaje y detectar problemas de salud como diarreas o parásitos para tomar los correctivos necesarios que eviten mayores pérdidas por bajos crecimientos.

Animales deben ser identificados

Toda medición, necesariamente, debe partir de una identificación adecuada de cada animal, por lo que desde los primeros días de vida es necesario realizarla, esto permitirá llevar adecuadamente los registros y reportar correctamente los eventos de cada animal de manera particular, diferenciando unos de otros.

Los sistemas de identificación que se usan son muy variados, los hay desde marcas o muescas en las orejas, marcas con hierro caliente, tatuajes, marcas en frío, cadenas con placas, aretes, hasta dispositivos electrónicos de aplicación subcutánea. (Lea: La lista de los sistemas desarrollados para identificar el ganado)

En ganado de carne y doble propósito la identificación más frecuente es el uso de hierro caliente y se realiza en el momento del destete, pero no es la más recomendable porque va en contra del bienestar animal. El uso de orejeras de plástico flexibles es cada vez más común en la identificación del ganado.

La identificación correcta de cada animal permite realizar el seguimiento productivo y reproductivo de los animales durante toda su vida.