En pequeñas fincas ganaderas donde cada espacio es importante para el desarrollo de la actividad, el contar con un ordeño mecánico móvil resulta de mucha utilidad.
Es el caso de la finca La Jícara, en Ventaquemada (Boyacá) especializada en lechería, donde realizan dos ordeños diarios a seis vacas y por muchos años se extrajo la leche de las vacas de forma manual.
Sin embargo, desde hace menos de un año se decidió dar un paso hacia la tecnificación del hato empezando por implementar un sistema de ordeño mecánico pero teniendo en cuenta que su predio es pequeño la mejor opción era implementar dicho método pero con una característica adicional, que fuera móvil. (Lea: Ordeño mecánico, una opción al alcance de todos los ganaderos)
Según Salvador Arévalo, su propietario, se buscó que fuera móvil por la facilidad para desplazarlo a donde vayan las vacas y además porque debido al costo de la máquina no se puede dejar en cualquier lugar porque se puede dañar por las inclemencias del clima o puede ser víctima de hurto.
Como en la finca no cuentan con un establo para tener las vacas se prefirió este sistema móvil que permite ir hasta donde están los animales para proceder a ordeñarlas.
Esta estrategia permite a los pequeños productores aprovechar de mejor manera los espacios de la finca porque para tener un establo tendrían que utilizar un potrero y allí construir la estructura. Adicionalmente construir un establo tiene un costo elevado.
Además, con el sistema de ordeño mecánico móvil se aprovechan todas las praderas para la alimentación de los bovinos. De acuerdo con lo expuesto por Arévalo optaron por adicionarle un motocultor y una zorra especial para trasladarlo a donde quiera que vayan las vacas.
Así mismo, indicó que si tuviera un establo tendría que construir el camino para trasladar las vacas, lo cual le incrementaría los gastos y habría que sacrificar una parte de la pradera que para el caso de esta finca que es pequeña resulta perjudicial porque cualquier metro que se pierda de pastoreo se siente. (Lea: Estos son los componentes en un sistema de ordeño mecánico tradicional)
De acuerdo con lo señalado por este ganadero, construir un establo con dos puestos de ordeño podría costar más de $6 millones, a lo cual habría que sumar el costo de hacer los caminos para llevar las vacas hasta este sitio para el ordeño. Mientras tanto tener el ordeño mecánico móvil adaptado al motocultor le costó $4 millones sin tener que hacer caminos ya que los operarios lo llevan a cada potrero donde estén las vacas.
De esta manera también los animales guardan la energía que podrían gastar desplazándose y la aprovechan para producir más leche.
A todo ello se suma la ventaja de la higiene y de salud de los operarios que, generalmente, por la actividad de ordeño diario terminan con problemas en las manos.
De igual manera, dijo, con el ordeño manual puede suceder que a pesar de presionar la ubre no se logre descargar toda la leche, mientras que de manera mecánica se logra distender aún más la glándula mamaria, estimular el animal y así aumentar la producción. En todo caso siempre se siguen los protocolos de higiene como la desinfección previa, el presellado y la limpieza del equipo y de los utensilios. }