Un concepto que cada vez cobra más fuerza en el mundo de la ganadería es el manejo holístico que es el "todo integral”. Este manejo parte del suelo pero también incluye la oferta forrajera que se tenga en los potreros y un tercer aspecto es el biotipo animal, todo ello dentro del marco del ecosistema en donde se ubique el predio.

Así lo planteó el Médico Veterinario Zootecnista especialista en producción bovina tropical Nicolás Benedetti, en una nota del programa Visión Agropecuaria Colombia, donde señaló que hay un marco superior que es la franja ecuatorial donde se ubica Colombia, lo que significa una zona con mucha actividad solar y que no se aprovecha como se debería. “Tenemos la potencialidad de ser los más eficientes productores de forraje en el mundo”.

Entre tanto, una publicación del Sena regional Sucre con base en un trabajo en Las Carolinas, una empresa ganadera en el departamento de Sucre, avalada por el Instituto Savory, señala que cuando esta metodología es aplicada en la administración de la tierra y el desarrollo de la ganadería regenerativa, su enfoque se direcciona a mejorar el funcionamiento de los procesos ecosistémicos (ciclo del agua, ciclo mineral, dinámica de comunidades y flujo de energía) a través de la planificación holística del pastoreo y el manejo en manada del ganado.

Considerar en forma simultánea y oportuna estas variables puede contribuir a regenerar los suelos a través del aumento en la concentración de materia orgánica, la actividad biológica, el crecimiento de diversidad de plantas y el incremento en la retención de agua lluvia, mejorando la capacidad de los suelos para producir alimentos sanos. (Lea: Manejo holístico y pastoreo continuo, dos sistemas positivos en Argentina)

En el tiempo en que se ha aplicado esta metodología se ha observado un aumento en la salud del agroecosistema, los suelos son cada vez más productivos logrando mantener la capacidad de carga en el área ganadera durante todo el año disminuyendo la dependencia de insumos externos. Iniciar un proyecto de ganadería regenerativa implica desistir de prácticas extractivas, disminuir el empleo de agroquímicos para fertilizar las praderas y controlar arvenses, disminuir la mecanización de los suelos, evitar desparasitar el ganado con vermífugos de alta residualidad, promover el crecimiento de plantas perennes, árboles nativos y crear hábitat para la fauna silvestre.

“Durante el tiempo que hemos desarrollado ganadería regenerativa utilizando manejo holístico, se ha incrementado la actividad biológica del suelo, la incorporación del estiércol y el aumento en la diversidad de plantas forrajeras. Esto se observa en campo, realizando Monitoreo Ecológico a través del cual se ha identificado la presencia y aumento en la población de fauna en el suelo durante la época de lluvias. Desde el año 2017, no se utilizan fertilizantes químicos ni se realiza control químico de arvenses, lo que se traduce en cero gastos en fertilizantes y herbicidas. No se emplea Ivermectina para controlar parásitos en el ganado, de esta manera se ha logrado mejorar las condiciones de hábitat para los escarabajos estercoleros, aliados fundamentales en el proceso de regeneración”, resalta la publicación.

Por su parte, Benedetti manifestó que se requiere empezar a involucrar esos conceptos del manejo holístico con la producción de alimentos, tanto en la parte agrícola como pecuaria. “Hay que empezar a romper paradigmas y hablar de cosas nuevas, aplicar los conceptos que tiene esta actividad”.

En la empresa ganadera se requiere tener animales equilibrados, que no sean agresivos y que no se asusten con la presencia humana para poder tener mejores resultados. Dentro del manejo hay un concepto a trabajar que es la impronta bovina que consiste en el acercamiento que se tiene con el ternero desde su nacimiento, cuando se le deben dar unos masajes para que se empiece a tener una confianza con las personas. (Lea: ¿Cómo influye el manejo holístico en el plan sanitario del predio?)

Otro aspecto clave cuando nace el animal es la alimentación, donde el calostro es fundamental pero igualmente es importante la desinfección del ombligo que por lo general se hace mal porque se usa yodo que se inactiva en materia orgánica.

Señaló que por ejemplo cuando se toma un vaso con yodo y se sumerge allí el cordón umbilical no funciona porque ya se desactivó esa materia prima. A ello se suma que por lo general se compra un yodo al 10 % y se diluye lo cual es otro error.

Igualmente manifestó que dentro del manejo holístico un factor más que es clave es la motivación a los trabajadores a través de dinámicas y charlas que marcan pauta y hacen que el operario sienta que es parte importante dentro del engranaje de la finca.