Esta tecnología no está muy difundida en Colombia porque muchos productores pecuarios no la conocen, creen que es muy costosa o inadecuada para las fincas pequeñas. Sin embargo, usted podría adquirir un biodigestor si sigue los consejos de un experto en instalación de estos sistemas.   CONtexto ganadero consultó a Carlos Quiñones, ingeniero agroindustrial de la Universidad del Tolima, que actualmente trabaja en la Fundación Bioagrodes, con la cual ha instalado más de 100 biodigestores en todo el país. (Lea: Biodigestores comienzan a tomar fuerza en Colombia)   “Este es un sistema de aprovechamiento de los residuos orgánicos para convertirlos en recursos como gas y fertilizantes. Generalmente se usa el estiércol de vaca, cerdo, gallinas, o cualquier otro animal, así como mieles de café, desechos de restaurante, residuos agropecuarios en general”, señaló.   Con este sistema, los productores obtienen gas metano, un compuesto parecido al propano o isopropil, que se puede usar para calentar y cocinar en predios que no tienen suministro de este servicio. Además, los líquidos que resultan de la fermentación se pueden usar como fertilizante.   La organización ofrece 3 tipos de biodigestores: geomembrana, tipo campana y plástico de flujo continuo tipo, llamado comúnmente como ‘salchicha’ por su forma tubular, el más demandado. (Lea: Producción de fertilizantes naturales a partir de deyecciones animales)   “El tipo salchicha es un modelo plástico tipo tubular, con capacidad de 10 m3. Tiene el mejor rendimiento porque la fermentación se da en forma horizontal, entonces hay un desplazamiento más suave de la materia en un proceso continuo, y los residuos viejos no se mezclan con los nuevos”, indicó.   El segundo modelo es similar, pero en lugar de plástico, utiliza una geomembrana de poliéster texturizado con protección UV. Tiene mayor producción de biogás (8 m3/día contra 3 en el anterior), que puede desplazar más lejos (el primero alcanza los 100 m3), y una duración más larga.   “Es para pequeñas y medianas fincas y tiene una garantía de 5 años, aunque puede durar 20 años, pues no necesita mantenimiento. Tiene antihongos y antibacterias”, precisó. (Lea: Biodigestores, tecnología para reducir contaminación en hatos agropecuarios)   Finalmente, el sistema tipo campana tiene un tanque en cemento y campana de PVC, metal o fija adobe, que puede tratar incluso las aguas negras de la casa. Con este sistema, usted puede cocinar hasta 6 horas por día, y puede adaptarse desde 0 hasta los 3.600 msnm.   Cada sistema requiere un tamaño de producción mínimo de 500 kg, que en porcinos puede ser una cerda con toda su camada en levante, o en bovinos, es una vaca estabulada del mismo peso o 4 lecheras estabuladas 6 horas al día.   De acuerdo con Quiñones, cualquier campesino puede acceder a este sistema gracias a la fundación. Solamente debe cavar el hueco que quiere el biodigestor y pagar la instalación, pues los materiales corren por cuenta de Bioagrodes.   “La empresa no tiene utilidades con respecto al trabajo, sino que genera mano de obra y empleo con estas labores sostenibles. Nosotros queremos ver un cambio en el agro, que las prácticas agropecuarias cambien, y difundir esta tecnología que lleva mucho tiempo en el mercado, pero aquí no se ha implementado con fuerza”, concluyó.   Si usted quiere conocer más sobre los diferentes tipos de biodigestores, llame al 3163425188, 3202907650 y 3214043812, o escriba al correo bioagrodes@gmail.com. También los puede encontrar en Twitter, Facebook e Instagram.