Según información suministrada por Carlos Mendieta*, “actualmente en los departamentos del Cesar y la Guajira de manera creciente se vienen presentando una serie de hechos que tienen prácticamente acorralados a los ganaderos y con esto me refiero al cárneo, abigeato, atraco en fincas, atracos en vías terciarias”. (Lea: En La Guajira y el Cesar la inseguridad no descansa)

Esto quiero quiere decir que los productores se siente acosados porque los delincuentes no les dejan espacios y han robado no solo sus animales y herramientas, sino también la tranquilidad porque ya no se sienten seguros.

De acuerdo con la fuente, “la queja de los ganaderos es que no se está viendo la fuerza pública en la ruralidad, por lo menos en estos departamentos del Cesar y la Guajira. Los ganaderos expresan su constante preocupación porque no se ve a las autoridades en las vías terciarias”.

A esto hay que sumarle que los mismos productores de los dos departamentos tienen la percepción que las autoridades no se han tomado el tiempo para hacer labores de inteligencia y acabar con estas bandas delincuenciales que atentan contra el trabajo en el campo.

“No se hace inteligencia, creemos que las autoridades actúan cuando ya sucede el hecho delictivo pero no se hace de manera preventiva en una acción de inteligencia que permita impedir que se generen estos delitos”, asegura Mendieta.

Para los productores de la región, existen muchas dificultades que están impidiendo sentirse seguros en el campo, pues mencionan que con la pandemia y con virtualidad, algunas acciones que antes eran fáciles, ahora son más complicadas.

En palabras de Mendieta, “para establecer una denuncia es muy complicado porque la plataforma en la que se hace no es amigable ya que maneja una serie de códigos y números que son jurídicos y que los ganaderos desconocen. Esto ha conllevado a que haya una desmotivación por parte del sector ganadero, quienes consideran que interactúan es con una maquina”.

Ambos departamentos no han tenido descanso ni mucho menos ayudas, razón por la que se ha visto presencia de grupos al margen de la ley, especialmente hacia los municipios de Aguachica, Pailitas en el Cesar y en la Guajira hacia el municipio de San Juan en la parte alta. (Lea: En La Guajira no dejan de sufrir a causa de la inseguridad)

Para contrarrestar esto, los ganaderos de la región hacen reuniones con las autoridades y se acuerdan estrategias y medidas, pero consideran que no se ven los resultados porque los niveles de inseguridad han aumentado notablemente.

“No vemos contraparte de inteligencia por parte de la fuerza pública y además el constante actuar de los delincuentes hacia los ganaderos es lo que permite que ellos se sientan arrinconados y preocupados porque a pesar que las autoridades lo escuchan, no se ve respuesta inteligente que permita que el hecho delictivo disminuya”, comenta el productor.

Estos dos departamentos reclaman la presencia constante de las autoridades, teniendo en cuenta que consideran que los delincuentes son astutos y les hacen las llamadas ‘labores de inteligencia’ a las autoridades y conocen los espacios y momentos en los cuales pueden actuar. (Lea: Trabajar en el campo se está volviendo un calvario debido a la inseguridad)

*Nombre cambiado a petición de la fuente