De acuerdo con un experto, si el país contara con un robusto programa de control lechero, los ganaderos tendrían mayores opciones para determinar cuál genética bovina, entre nacional e importada, podría traerles mayores beneficios para aumentar su productividad.
Rubén Darío Galvis, zootecnista de la Universidad de Antioquia, PhD de la Universidad Nacional y docente en la sede de Medellín, ha manifestado que el país requiere de un esquema para recolectar información precisa sobre rendimiento lechero en los hatos nacionales.
A su juicio, un programa de control lechero coordinado por el Ministerio de Agricultura y ejecutado en todo el territorio permitiría identificar los mejores ejemplares a nivel nacional. (Reportaje: El control lechero es necesario para que la ganadería no se estanque)
“Los medianos y grandes ganaderos pueden tener acceso a la genética importada, pero no sabemos qué tanto beneficio representa para su productividad o no hemos identificado cuáles serían los animales más adecuados para optimizar”, manifestó.
El académico lamentó que Colombia no tenga un sólido y moderno programa de control lechero, a pesar de que otros países comenzaron con estos sistemas hasta cien años atrás en algunos casos y tienen información específica sobre determinadas líneas genéticas.
En cambio, nuestra ganadería no cuenta con este tipo de registros ni tampoco se avizoran iniciativas gubernamentales para identificar la genética más adecuada a nuestras condiciones ambientales. (Lea: Los dos enfoques de la utilidad del control lechero para las ganaderías)
“La gente cree que la forma de seleccionar las vacas se hace en las exposiciones ganaderas y resulta que escogen de un grupo de 30 o 40 vacas que asistieron ese día, la más bonita y de mejor conformación, pero eso no nos dice si es la que más leche produce, de qué calidad o de la mejor salud mamaria”, indicó.
Y agregó: “No podemos seguir ejerciendo una ganadería si la selección se continúa haciendo en las ferias de ganado, que son eventos sociales donde se congregan los productores pero no deben confundirse con los eventos donde se seleccionan las mejores vacas del país”.
Para elegir la mejor vaca lechera, se debe realizar un programa de control de lechero, lo que haría pensar que este ejemplar no se vería en las exposiciones ni sería exhibida por sus propietarios. (Lea: 5 consejos para desarrollar una lechería especializada en Colombia)
“Otro tema es la selección genómica, que hoy en día se ha dicho que ya no se requiere que los animales tengan muchos registros de producción porque se toma una muestra genética y la selección genómica dice el nivel de rendimiento”, señaló.
No obstante, el experto manifestó que las pruebas genómicas fueron desarrolladas en Estados Unidos y Europa, lo que representa el mismo inconveniente de la genética importada porque los ambientes son distintos. En este sentido, crías de bovinos que registraron alta producción en estos lugares no tendrían el mismo rendimiento que sus progenitores.
“Tenemos que hacer nuestros propios programas de control lechero y encontrar nuestros propios marcadores genéticos que nos relaciones los genes con la productividad de los animales. Sin duda, el trabajo está por hacer en todos los sentidos”, remató Galvis.