Las mujeres han ocupado un papel fundamental en la ruralidad colombiana, por lo que muchas de ellas han dedicado su vida a crear un campo más amigable con el medio ambiente.
Es claro que muchas son las mujeres que día a día se despiertan a realizar labores ganaderas en varias zonas del país. Por lo tanto, el papel de la mujer ha cambiado y hoy son ellas quienes aportan sus esfuerzos a cambiar el rumbo de la ganadería y convertir a la actividad en una más armónica con el medio. (Lea: Así hicieron estas 2 campesinas de Cauca para tener sus propios negocios)
Esto se puede ver evidenciado en el alto número de mujeres que quisieron cambiar su mentalidad del cambio y fueron participes del proyecto Ganadería Colombiana Sostenible, GCS.
Para este proyecto, es fundamental la contribución de la mujer como eje fundamental de las familias, inyectando fortaleza y compromiso a sus fincas, enseñando a sus hijos las labores y valores propios de la vida del campo, esperando que algún día puedan continuar con esa responsabilidad tan grande que trasciende al desarrollo de un país.
De esta manera, son las mujeres quienes no solo se encargan de cumplir su papel de madre y esposa, sino que también están siendo el eje principal del negocio ganadero en el país.
Estas mujeres día a día a la par con sus familias o solas, continúan haciendo del campo un negocio sostenible y cada vez más responsable y amigable con el medio ambiente. (Lea: Gobierno celebra Día Internacional de la Mujer Rural)
Hoy en día es claro evidenciar como desde las hijas hasta las esposas se encargan de madrugar a conocer y aprender del campo, para luego ser ellas mismas quienes contribuyan con un granito de arena en la implementación de modelos de producción mucho más sostenibles.
Esas mujeres desempeñan las labores de trabajo fuerte y que a la par con sus compañeros siembran, cargan, manipulan equipos y elementos de maquinaria pesada, así como atraviesan los caminos necesarios para llegar hasta donde se encuentra su objetivo.
De esta forma, están haciendo del campo colombiano un lugar donde es posible realizar labores ganaderos, siempre y cuando vaya de la mano con el uso de herramientas como sistemas silvopastoriles, que no solo le ayudan al medio sino que también genera mejor y más rentabilidad para sus negocios.
Finalmente, el proyecto GCS en su desarrollo destaca la contribución de la mujer en el desarrollo ganadero, pues la considera el eje del negocio por ser la mujer campesina, ganadera, trabajadora y pujante. (Lea: Luceny, una líder innata con vocación ganadera)
Fuente: Guía Nuestra mujeres rurales de Ganadería Colombiana Sostenible