La inmunidad es una de las características claves con las que debe contar un animal durante sus etapas de desarrollo, pues esto lo ayuda a ser sano y desarrollar sus habilidades. Conozca la importancia de estas en el periodo de preparto y parto.
En la última charla virtual de TVGAN llamada ‘Alternativas para mejorar la inmunidad en los terneros’, una experta expone que para que el animal logre desarrollarse en las mejores condiciones en su edad temprana y adulta, se deben tener en cuenta ciertos cuidados en el momento de preparto y parto que garantizan su inmunidad. (Lea: Transición de la vaca, periodo crítico antes y después del parto)
Patricia Díaz, especialista técnica en ganadería de Virbac, indica es importante hablar de la inmunidad de las terneras porque este es un factor determinante en la salud del animal, así como en su disponibilidad para los tipos de producción en los que va a trabajar.
“La inmunidad es fundamental en las terneras porque esta contribuye a tener animales muy sanos, así como a lograr el objetivo de producción de la finca ya sea leche, carne o genética”, explica Díaz durante la charla.
La experta asegura que además de esto, económicamente hablando esta inmunidad ayuda a evitar perdidas monetarias en tratamientos de antibióticos e incluso muertes de los ganados derivado a otras causas, teniendo presente que por eso se recomienda que la prevención es más barata que entrar en procesos de enfermedades en la etapa de crianza.
Preparto
Durante el preparto en el periodo del tiempo seco, las vacas tienen unos cambios físicos y hormonales importantes que llevan al nacimiento de la cría. En este periodo hay unas necesidades energéticas que aumentan en el último tercio de la gestación y más aún en el último mes porque allí se da el crecimiento más rápido del feto.
Además en este tiempo también hay producción de calostro y la vaca en esta época de producción va a disminuir el consumo de materia seca, lo que va de la mano con la baja en la ingesta de algunos minerales, vitaminas que son tan esenciales en la producción. (Lea: ¿Qué debe evaluar durante el preparto?)
“En este tiempo de preparto debemos tener en cuenta la energía, la proteína, las vitaminas y el aporte de minerales para que todo se comporte como un engranaje porque va a suplir las necesidades de la vaca y se va a transferir esta nutrición al ternero”, describe Díaz.
Cuando hay una carencia de algunos de estos factores, se va a encontrar con que hay terneros con bajo peso al nacimiento, crecimiento retardado y hasta se pueden presentar casos clínicos de las enfermedades en los predios ganaderos.
“Dentro de estos minerales esenciales para ser transferidos de la madre a la cría a través de la placenta o por medio del calostro se encuentra el fósforo, selenio, cobre, magnesio y potasio. Estos intervienen en la reproducción, así como en un aumento y apoyo del sistema inmunológico porque son fuentes de antioxidantes que contribuyen en procesos metabólicos de enzimas y también aportan a disminuir los efectos negativos del estrés oxidativo que se genera en los animales desde el nacimiento como en los otros momentos de vida”, detalla Díaz.
Además, el manejo de la vaca en el tiempo seco determina la cantidad y calidad del calostro que se va a suministrar a la cría que depende de la calidad de alimentación, así como del tiempo seco requerido.
Parto
Para el caso de la inmunidad en el momento del parto, la experta expone que es importante saber dónde están dando a luz estas vacas, si es una zona limpia o si está llena de barro debido a las condiciones climatológicas.
Finalmente, Díaz concluye que “se debe tener presente que estos potreros donde paran las vacas no pueden tener la presencia de animales que les generen enfermedades o estrés, entonces debemos buscar disminuir esos factores”. (Lea: La crianza de las terneras determina el futuro del negocio ganadero)