El mejoramiento genético a partir del uso de biotecnologías ha sido un aliado clave para que los ganaderos de diferentes regiones del país alcancen una alta productividad en sus predios y cuenten con animales eficientes y con una buena capacidad reproductiva.   La inseminación artificial es una de las técnicas que se usa para tal fin. Esta práctica requiere una inversión considerable por lo cual se espera que cuando se realice, el procedimiento sea exitoso   Inseminar de Colombia es una empresa líder que distribuye y comercializa semen del mejor ganado bovino de todas las razas presentes en el país y que además brinda asesorías y evaluaciones para el mejoramiento genético. (Lea: Mejoramiento genético animal, apuesta de la ganadería colombiana)   Como complemento a la venta del semen, esta empresa ofrece equipos de inseminación artificial, incluidos los famosos termos criogénicos MVE.   Luis Alfonso González, gerente de Inseminar expuso que su compañía ofrece productos agropecuarios, básicamente material seminal, con el ánimo de que sus clientes maximicen utilidades en sus ganaderías.   “Sin duda alguna el Atlántico y toda la Costa Caribe tienen un gran futuro en la ganadería de carne y de leche y la forma como más fácilmente se progresa es a través de mejoramiento genético e inseminando las vacas”, expuso.   Según González, su empresa siempre ha tratado de brindar el mejor servicio y de contar con un producto muy comercial y de calidad pues en la medida en que los ganaderos logren ser más productivos, podrán contar con negocios rentables y seguir desarrollando la actividad. (Lea: 7 pasos para realizar inseminación artificial de forma correcta)   “Traemos productos de leche, carne y doble propósito de los mejores centros de inseminación artificial del planeta satisfaciendo la demanda en un mercado altamente competitivo”, comentó.

Razas lecheras y de carne de la mundialmente famosa cooperativa estadounidense CRI (Cooperative Resources International), semen europeo de leche de “CRV Holland Genetics”, semen de doble propósito normando de la cooperativa francesa “Genois”, Gyr lechero y Nelore de la subsidiaria brasilera del grupo CRV “Lagoa” y Simmental europeo de la empresa suiza “Select Star”.

El gerente de la compañía precisó que muchos ganaderos no le apuestan a este tema porque creen que es muy costoso y según él no es así.   “Una pajilla para inseminar una vaca cuesta entre $20 mil y $40 mil, en algunos casos se necesitan 2 para preñarla. Cuando se consigue este objetivo se garantiza obtener unas crías que evidentemente son mejores que las madres”, sostuvo.   Agregó que aunque este tipo de practicas representan unos costos, los beneficios son “absolutamente” enormes. (Lea: Claves para garantizar la preñez bovina con inseminación artificial)  

La empresa cuenta con un equipo de vendedores que apoyados por sus oficinas en Bogotá, Medellín, Centro Chía, Bucaramanga y Barranquilla están atentos para atender al país ganadero.