Las vacas en estado de transición pueden suplementarse con Propilenglicol y Propionato lo que les permite mejorar su estado de salud, ser más eficientes en materia reproductiva y a la vez, volverse aún más productivas.   Al suplementar con precursores energéticos como el Propilenglicol y el Propionato de Calcio, durante 90 días en 21 vacas, se logró establecer un aumento de la producción de leche del 13.4 % y a la vez, una disminución en el riesgo de enfermedades infecciosas.   Así lo estableció el estudio denominado ʿEfecto de dos suplementos energéticos sobre el control del balance energético negativo en vacas de producción de lecheʾ, realizado por Laura Lucia Gómez Ortiz, para optar al título de Magister en Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Palmira. (Lea: Efecto de dos suplementos energéticos sobre el control del balance energético negativo en vacas de producción de leche)   La investigación permitió evaluar el efecto de dos suplementos energéticos asociados al propionato y de alta densidad sobre el balance energético negativo durante el período de transición de vacas lecheras.   Es de destacar que el periodo de transición es considerado como aquella etapa que transcurre desde tres semanas antes del parto hasta tres o cuatro semanas después del parto (Jaurena, 2003) donde se producen modificaciones dramáticas en el estado endocrino de las vacas que las preparan para el parto y la lactogénesis.   Gómez Ortiz utilizó 21 vacas de dos a tres partos, con producciones promedio de 15 litros diarios que estuvieran en los 15 días próximos al parto, las cuales distribuyó en tres grupos: al primero le suministró 150 gramos de propilenglicol vía oral cada tercer día durante 90 días. (Lea: Los 9 signos externos de una vaca próxima al parto)   Al segundo le dio 200 gramos de propionato de calcio en el mismo periodo de tiempo cuya periodicidad fue de un día de por medio y el tercero, no recibió suplementación.   El resultado   Según Gómez la suplementación con estos precursores mejoró la respuesta inmune de las vacas durante el periodo de transición y reveló un aumento en el porcentaje de neutrófilos, los cuales, al ser células de defensa del organismo, ayudan a disminuir los riesgos de aparición de enfermedades infecciosas. (Lea: La estrategia para conseguir un manejo integral de la vaca de cría)   La suplementación con propilenglicol disminuyó el balance energético negativo de las vacas y aumentó los niveles séricos de metabolitos energéticos, de minerales y hormonas.   Igualmente aumentó la eficiencia reproductiva del hato con una menor incidencia en la repetición de celos después de la inseminación.   De acuerdo con Gómez, suplementar las vacas con propilenglicol permitió incrementar en 13.4 % la producción de leche, y asimismo, elevar los costos de producción en 2.8 % lo que equivale a una relación de costo beneficio, positiva.   Amigo ganadero, consulte con su médico veterinario antes de poner en práctica lo señalado en esta nota.