Cada vez que se celebra el día mundial del agua se recuerda la vulnerabilidad a la que se encuentra expuesto el mundo con el abastecimiento de este recurso. Colombia se encuentra en alto riesgo de desabastecimiento.   La FAO ha manifestado la necesidad de aumentar la producción de alimentos en 60 % para cerrar las brechas de la nutrición, atender el crecimiento de la población y adaptarse a los cambios alimentarios en los próximos 30 años, en los que incluye un aumento en el uso del agua.   Y en ellos incluye el manejo racional del agua pues en esta gestión estimó un incremento de la extracción del agua para la agricultura del 14 por ciento en ese mismo periodo, lo que representa una tasa anual de crecimiento del 0,6 por ciento. (Lea: Gestión del agua: hacia el 2030)   Recomendó pasar de "una cultura de gestión del suministro" a otra de "gestión de la demanda del agua" en el sentido de manejar racionalmente dicho recurso.   Caso de Colombia   En Colombia el Estudio Nacional del Agua registró unos indicadores que dan cuenta del mal manejo de este recurso, de su alta contaminación y de la vulnerabilidad para mantener la disponibilidad de agua. (Lea: Construir represas para almacenar agua en cantidad y calidad)   De ahí que haya considerado adoptar medidas para su conservación. Es más, concluyó que de no hacerlo existe un alto riesgo de desabastecimiento de agua para un grueso porcentaje -el 69 %- de la población colombiana.   Plan de acción   En el sentido de articular esfuerzos, Maryluz Mejía de Pumarejo, presidente de la Asociación Colombiana de Ingeniería Sanitaria y Ambiental, Acodal, propuso implementar un plan estratégico nacional para el manejo integral del agua, y realizar un inventario que reconozca la diversidad de las zonas rurales. (Lea: 14 opciones para tener agua en fincas ganaderas)   Asimismo propone crear la Agencia Nacional del Agua y una Superintendencia del Ambiente para seguir y controlar las afectaciones a los recursos naturales, y crear la Unidad Administrativa Especial de Agua y Saneamiento, desarrollar el Plan Nacional de Reforestación de Cuencas Abastecedoras, y al mismo tiempo, construir embalses multipropósito para atender regiones que soportan sequía o escasez.