Tras la publicación hecha por este diario el pasado 30 de abril, en donde hay mucha incertidumbre frente al futuro de la producción láctea en el país con la entrada en vigencia de los TLC con EE.UU. y UE, los productores no ocultaron su preocupación ante el panorama que podría avecinarse.  (Lea: Por TLC con EE.UU. y UE desaparecería 53 % de la ganadería colombiana)

Para Héctor Barrera, ganadero ubicado en el oriente del país, una vez empiecen a entrar más lácteos de EE.UU. y EU, los hatos doble propósito desaparecerían, ya que carecen de la eficiencia que tienen esas potencias. (Lea: TLC con EE.UU.: Colombia sigue sin exportar carne e inundada de leche por importaciones)

Sin embargo, se cuestionó y planteó la posibilidad de migrar a la producción de carne para ser más competitivos.

Por su parte, Michael Rua Franco, productor de leche en la sabana Cundiboyacense, fue más reflexivo y sostuvo que no es momento de especular, ya que si todo el país se dedicara a la producción de carne, aumentaría considerablemente la competencia entre ganaderos y el abastecimiento sería exclusivo de las importaciones.

“Al aumentar la demanda también se generaría una regulación de precios, por lo que probablemente tomaríamos una leche más costosa”, argumentó. (Lea: Comienza el TLC con la UE, ¿será la quiebra ganadera?)

En tanto, Mauricio Moreno, productor ubicado en los Llanos Orientales, rechazó la estimación referida a que alrededor del 53 % de la ganadería colombiana (doble propósito) desaparecería, ya que si 250 mil ganaderos salen del mercado es por su falta de competitividad y creatividad, así por no ver las oportunidades para darle un giro a su situación.

“En este mundo globalizado, en vez de destruir o en este caso frenar al competidor –perjudicando al consumidor o cliente que es el actor más importante de cualquier negocio–, lo que se deben hacer son sinergias buscando la competitividad. En otras palabras, más consumidores contentos y mejores dividendos”, manifestó.

Rua Franco estuvo de acuerdo a lo expresado por Moreno, pues las sinergias son las que vuelven a los productores más competitivos, especialmente a los pequeños y medianos que no les va a quedar nada fácil hacerles frente a los negocios de libre comercio si siguen como rueda suelta. (Lea: Fedegán nunca dejó de advertir los riesgos del TLC con la UE)

“La individualidad nos está matando, y desde luego el mercado objetivo no puede seguir siendo el convencional, hay que apuntarle a unirnos para intentar hacer cosas distintas”, remató.