Si bien la fuente principal de alimentación de los bovinos es el pasto, se puede recurrir a otras alternativas para alimentarlos en épocas de escasez, como por ejemplo, las frutas, las cuales pueden resultar de gran beneficio.
En la mayoría de las fincas ganaderas se encuentran árboles frutales, cuyos frutos se desperdician en muchos casos por falta de conocimiento.
Debido a que las frutas aportan energía, vitaminas y minerales, con un tratamiento adecuado sirven como suplemento alimenticio para el ganado, estas se pueden suministrar de forma fresa o ensilada.
Mediante un riguroso proceso de ensilaje, las frutas pueden almacenarse para épocas de escasez de alimento y son muy bien asimiladas por los bovinos. (Lea: Estas son las principales frutas que come el ganado)
Sonia Sánchez Ramírez, ganadera de La Mesa, Cundinamarca, explicó que en su finca cuenta con mango, guayaba, guanábana, y frutas cítricas como naranja, mandarina, y limón. Con respecto al ensilaje, contó que cualquier fruta sirve para prepararlo.
En su caso, ellos venden la fruta de primera y la que es rechazada, la utilizan para hacer el silo. Esta ganadera lleva más de una década alimentando a sus bovinos mediante este sistema, obteniendo muy bueno resultados.
De acuerdo con Sánchez Ramírez, cuando se deja la fruta de rechazo cerca al árbol, empiezan a aparecen problemas como los hongos y las moscas, enemigos que afectan las cosechas actuales y venideras.
Algunos estudios indican que el silo de frutas mejoran notablemente los ácidos grasos volátiles de la leche, responsables de componentes como la proteína y la grasa. (Lea: Frutos frescos y secos, gran opción nutricional para el ganado)
La ganadera indicó que para hacer este alimento no se requiere tener un aparato especial o ser un experto. Asimismo dijo que cuando este silo se le ofrece a los animales, se puede observar como componentes de la leche como los sólidos y la grasa aumentan.
En cuanto a la preparación, la productora comentó que lo primero que se hace es recolectar la fruta y aclaró que puede ser la que está caída en el suelo. En ese sentido recomendó verificar que ninguna de las frutas, de ninguna especie, tenga algún hongo blanco o verdoso.
El siguiente paso es cortar la fruta en trozos pequeños, luego se vierten en una caneca plástica, no metálica porque puede generar acidez.
La mezcla del silo requiere un mantenimiento diario, es decir, todos los días se debe revolver, por lo menos una vez, ojalá dos.
También aconsejó revisar y evitar que en la mezcla se forme una especie de nata aceitosa de color, si esta aparece es importante sacarla lo más profundo posible para no quede rastro. (Lea: Frutos de silvopastoriles: alimento fresco o en silo para el ganado)
En algunos casos puede aparecer un hongo en el borde de la caneca de color blanco o negro, que también se recomienda retirar. Antes de suministrar el silo, este se debe dejar fermentar por lo menos durante 27 días.
Fuente: La finca de hoy.