Para Fundagán las excusas no existen, por eso ni el verano, ni el estado de las vías, ni lo alejado de alguna de población impide que se llegue a donde una familia espera el animal. 14 familias del sur de Bolívar y Santander nuevas beneficiarias.
Muchos dicen que construir paz no es fácil, en especial cuando ‘El Niño’ llega y las familias día a día buscan un sustento alimenticio. Se comenta que las ayudas están, pero que el estado de algunas vías no contribuye al desarrollo social y rural. La Fundación Colombia Ganadera, Fundagán, es consciente de ello y por eso sigue contribuyendo a que más familias puedan tener un sustento diario.
La misión: generar el desarrollo integral en el campo mediante la entrega de vacas preñadas. Fundagán, se propuso darle una solución a la pobreza rural.
El programa ‘Una vaca por la paz’, liderado por Fundagán, que también cuenta con el apoyo de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, asumió nuevamente el reto de cumplirle a 14 familias en el sur de Bolívar y Santander, con el fin de que tengan un sustento económico y alimenticio e incluso que a partir de él se pueda pensar en un proyecto de vida. (Lea: Regalar una vaca incrementa el nivel económico y nutricional de un campesino)
Clara Mercedes Torres Herrera, coordinadora en Santander de la Unidad Regional de Desarrollo Ganadero, de Fedegán dijo en diálogo con CONtexto ganadero que la idea con este programa es llegar a comunidades menos favorecidas con el fin de favorecer a pequeños campesinos.
“Uno se siente muy feliz porque es la parte humana la que sale a relucir, ya que se escogen a familias en extrema pobreza, que vivan en zonas muy alejadas, con malas vías de comunicación, sin acceso a servicios, que estén inscritos en el Sisbén, tengan tierras y algo de conocimiento sobre el manejo animal y alimento”, comentó Torres Herrera.
Sin embargo, lograr llegar con los semovientes a los predios de las 14 familias beneficiadas no fue una tarea fácil, más complicada por estos días por las condiciones climáticas que afronta la región costera de Colombia.
“Hoy estamos haciendo la entrega de 7 vacas en el sur de Bolívar. Pero llegar a este punto no fue fácil porque las vacas las compramos en La Gloria, y el río Magdalena estaba muy bajito, entonces tuvimos que esperar 3 horas para que llegara otro ferry e irnos por río Viejo y eso nos retrasó todo el cronograma. A pesar de esto, hoy un total de 7 familias tienen sus animales preñados”, indicó José Fernando Higuera, profesional en Gestión productiva y Salud Animal de Fedegán en la región. (Lea: Niño víctima de la violencia recibe Vaca por la paz)
Pero la travesía continuaba porque una vez las vacas llegaron al sur de Bolívar debían ser trasladadas a las diferentes veredas donde viven las familias beneficiadas. De acuerdo con Higuera, el estado de las vías es precario, aunque el esfuerzo valía la pena porque las familias debían recibir la compañía que les daría un sustento alimenticio y económico.
“Cuando llegó nuestra vaquita teníamos mucha alegría porque nuestra situación es precaria y lo fue especialmente durante la ola invernal, pero esperamos que cambie. Ahora, con mi señora, mis 2 hijos y mis 2 nietos tendremos con qué alimentarnos diariamente”, indicó Luis Eduardo Tafur, uno de los beneficiados, quien también sostuvo que donará la primera cría que tenga “Regalo”, esto con el fin de ayudar a otra familia que se encuentre en similares condiciones.
Para Adriana Romero Romero, beneficiaria de una de las 6 semovientes preñadas que se entregaron en Santander, la vaca es una herramienta de productividad y desarrollo de las familias, les brinda la posibilidad de convertirse en pequeños productores y a su vez, les permite iniciar procesos de generación de ingresos que en algo ayudan a la superación de la pobreza. (Lea: El soldado Andelfo y su familia reciben una 'vaca por la paz')
“Que a uno le den un regalo como este, eso no pasa nunca. Acá con lo que nos pagan por un jornal en la siembra de tabaco, maíz y frijoles no nos alcanza para comprar las cosas que necesitamos, mucho menos para comprar una vaquita. Una vaca para mí y mis 4 hijos es como la mamá de una familia, le da para todo, con la leche nos alimentamos y con las crías la multiplicamos” expresó Romero.
Durante este mes, la Fundación entregará vacas preñadas a familias rurales en los departamentos de Bolívar, Cundinamarca, Huila, Nariño, Sucre y Tolima, ampliando el compromiso y número de beneficiarios que hoy asciende a 2.000 en todo el territorio nacional.
Hasta el momento el programa beneficia en Santander a 64 familias de las cuales 15 han entregado las primeras crías para beneficiar a otras en igualdad de condiciones.
En el caso de Bolívar, el programa beneficia a 145 familias de las cuales 10 ya han entregado las primeras crías. (Lea: Infantes de Marina reciben 'Una vaca por la paz')
Finalmente, cabe resaltar que durante 5 años los beneficiarios del programa son acompañados por técnicos de Fedegán y el Fondo Nacional del Ganado, permitiendo así el aseguramiento del ciclo de vida de los semovientes y además, contar con asesoría y acompañamiento directo.