Durante casi 60 años, el país tuvo que lidiar con la presencia del virus en casi todo su territorio, hasta que finalmente Fedegán y el Fondo Nacional del Ganado erradicaron la enfermedad en 2009. Así fue la labor del gremio cúpula, que se ha visto empañada por los recientes focos de los últimos 2 años. En efecto, con la reaparición del virus en territorio colombiano en junio de 2017, la Organización Mundial de Sanidad Animal, OIE, suspendió la certificación como país libre de fiebre aftosa que Colombia había obtenido 8 años atrás. Casi de un solo tajo se borraron los esfuerzos de 22 años de Fedegán-FNG y la inversión de un billón de pesos en las campañas de vacunación, sin contar los recursos gastados años atrás. (Lea: Ganaderos extrañan a Fedegán como operador del ciclo de vacunación) En ese entonces, el país ganadero recibió la lamentable noticia de la reaparición de la enfermedad con un foco en Tame (Arauca), a la cual siguieron otros en Cúcuta (Norte de Santander), y en Tibacuy (Cundinamarca), así como un brote en Yacopí y Caparrapí, poblaciones del mismo departamento. La noticia fue un duro golpe a la ganadería, pues los productores creían haber dejado atrás una enfermedad que llegó al país hace casi 70 años y que ha impedido, entre otros, la exportación de carne y leche a mercados de valor como Estados Unidos y la Unión Europea, desaprovechando los TLC firmados hace más de un lustro con ambas potencias. Aun cuando el estatus se recuperó en diciembre del año pasado, Colombia lo volvió a perder tras la aparición de nuevos focos de fiebre aftosa en bovinos en Sogamoso (Boyacá) y San Diego (Cesar), así como un tercero en cerdos en Maicao (La Guajira). En esta semana que se cumple un mes desde esta nueva crisis, CONtexto ganadero hace un recuento de las 7 décadas de lucha incesante contra un virus que llegó a nuestro territorio y se niega a dejarlo, como consecuencia de arrebatar la operación del ciclo de vacunación a Fedegán y al FNG. Cronología de la fiebre aftosa 1950: La fiebre aftosa entró a Colombia en 1950 cuando animales infectados ingresaron al departamento de Arauca procedentes de Venezuela. A partir de este momento, los serotipos A, O y C del virus han estado presentes. 1951: El serotipo A se diagnosticó por primera vez en Valle del Cauca y fue endémico durante décadas, mientras que el C se presentó en Leticia en 2 ocasiones, proveniente del Brasil. Este fue erradicado mediante sacrificio y vacunación, pero los serotipos A y O se difundieron por todo el país como consecuencia de movilización de animales. Las acciones de prevención eran exclusivas de los ganaderos, quienes importaban ellos mismos la vacuna. 1956: Se crea Instituto Zooprofiláctico Colombiano, entidad que se encargó de la producción de vacuna y estableció unidades de diagnóstico para la atención del sector. (Lea: Así ha manejado Fedegán el precio de la vacuna en los últimos 9 años) 1968: Nace el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA), con funciones de control sanitario, y de la Empresa Colombiana de Productos Veterinarios (Vecol), que asumió la producción de vacuna. 1972: El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) otorgó un crédito que incluyó el proyecto de control de fiebre aftosa y de brucelosis bovina ejecutado por el Ministerio de Agricultura y el ICA, lo que a su vez permitió la construcción de la infraestructura de Sanidad Animal. 1973: Comienza el programa de cooperación ICA-USDA contra la fiebre aftosa. Se trata de un acuerdo con el Departamento de Agricultura de EE.UU. para actividades de control y erradicación de la enfermedad en el noroccidente de Chocó y el Urabá antioqueño, y así impedir la difusión de la enfermedad hacia Centro y Norteamérica. 1974: Colombia declaró libre de fiebre aftosa al área noroccidental de Chocó y de control intensivo al Urabá antioqueño. Se erradicaron los últimos 2 focos por fusil sanitario, se suspendió la vacuna y se reconoce a esta zona como libre sin vacunación. 1980: Vecol introdujo nuevos virus a la vacuna anti-aftosa para imprimirle un efecto tetravalente, así como mejoró los sistemas de embalaje y transporte. Para desarrollar esta medida, el Gobierno de la época inició un operativo sanitario con inspecciones y vacunaciones masivas obligatorias. 1985: Mientras el centro del país padece el rebrote de aftosa, en el mes de abril se efectuó el último ciclo en 6 sectores del Urabá antioqueño, alcanzando 500 mil bovinos libres de la enfermedad, con lo cual se espera que al finalizar la década, la enfermedad haya sido erradicada de la Costa Atlántica. Sin embargo, en mayo se desató un brote en la Sabana de Bogotá, ocasionado por una cepa viral identificada como A-Sabana-85, generando una epidemia que hasta agosto provocó 210 focos, y se extendió a otras zonas como la cuenca de Chiquinquirá y los departamentos del Meta, Arauca, Casanare, Santander y el Magdalena medio. 1986: Un estudio del MinAgricultura contratado con el Centro de Estudios Ganaderos y Agrícolas planteó que las dificultades de administración del ICA impedían ejecutar la campaña para erradicar el virus de la aftosa y propuso un plan de acción. Esto se ajusta a la idea de crear el Fondo Nacional del Ganado del que se viene hablando desde hace varios años. 1988: En Washington se aprueba un plan que cuenta con la cooperación técnica de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), de las Naciones Unidas, Banco Mundial, BID, IICA y OEA para erradicar la enfermedad antes de 2000. 1992: Luego de ser designado como presidente ejecutivo de Fedegán, Jorge Visbal Martelo manifiesta su decisión ante los medios de reactivar el proyecto de creación del FNG. (Informe: Se cumple un año del brote de fiebre aftosa en Colombia) 1993: El 10 de diciembre, el presidente César Gaviria sancionó la ley por la cual se crea la Cuota de Fomento Ganadero y Lechero (CGFL) y el Fondo Nacional del Ganado, lo que da inicio a una nueva era de la ganadería colombiana. 1994: Esta ley es reglamentada por el decreto 696 del 30 de abril de 1994, con lo cual se da inicio a las operaciones del FNG. El 15 de abril, Fedegán y el MinAgricultura suscriben el primer contrato para que la federación administre los recursos como gremio cúpula de los ganaderos. 1995: El 14 de febrero, en el Coliseo Holstein en cercanías a Bogotá, Fedegán lanzó la campaña “Colombia sin aftosa, un propósito nacional”, para trabajar de la mano con el ICA en la erradicación del virus con recursos del FNG. 1996: Se lanza el Plan Nacional de Erradicación de la Fiebre Aftosa, desarrollado en conjunto por el MinAgricultura, ICA, Fedegán, Fedefondos, Acovez y los laboratorios productores de vacuna. Durante el segundo ciclo de vacunación del año, iniciaron los primeros 10 proyectos locales pilotos que soportarán el esfuerzo operativo de la campaña. Estos son dotados con equipos de oficina, sistematización y de frío, así como también cuentan con una secretaria y un profesional veterinario a cargo para contratar vacunadores y programar los ciclos. 1997: El presidente Samper sancionó la Ley 395 de 1997 “Por la cual se declara de interés social nacional y como prioridad sanitaria la erradicación de la fiebre aftosa en todo el territorio colombiano y se dictan otras medidas encaminadas a tal fin”. Esta norma responsabiliza a Fedegán, a través de sus organizaciones regionales, de la comercialización de la vacuna, de la ejecución de la vacunación y de su registro oficial. Se oficializan los 2 ciclos, de 45 días cada uno. 2001: En mayo, Colombia recibió por parte de la OIE la certificación internacional de libre de aftosa para la zona norte del país (Córdoba, Sucre, Magdalena, La Guajira, territorios de Bolívar, Ceasr, Antioquia y Caldas). Entre tanto, la primera campaña de ese año logró por primera vez una cobertura superior al 90 % del inventario nacional, inoculando más de 18 millones 626 mil bovinos. Este año, se crea el Sistema de Información Técnica (SIT) para el manejo de datos de los censos ganaderos y los resultados de cada ciclo. Esta herramienta será indispensable para consolidar el hato de bovinos, diferenciado por categorías de sexo y edad, así como el inventario de cada predio. 2003: La OIE certificó una zona 2 libre de aftosa con vacunación, desde Necoclí (Antioquia), municipios del sur de Bolívar, 10 de Cesar, 11 de Norte de Santander y 52 de Santander, un total de 91 municipios. Con esto, Colombia cubre cerca del 50 % del hato nacional libre de la enfermedad. 2004: Tras la llegada de José Félix Lafaurie a la presidencia ejecutiva de Fedegán, se expide la Ley 914 de 2004 mediante la cual se creó el Sistema Nacional de Identificación e Información del Ganado Bovino, SINIGAN, el programa de trazabilidad. 2005: Se aprueba zona 3 libre con vacunación incluye los departamentos de Guaviare, Quindío y Risaralda, territorios del Magdalena medio de Antioquia, Boyacá y Caldas, norte del Caquetá, Santander, y territorios del centro sur del Tolima, Valle, Chocó, Amazonas, Guainía y Vaupés. 2007: Otra nueva aprobación con la zona 4 (Nariño, Cauca, Putumayo, Huila y el resto de Tolima, Valle y Caquetá), y al año siguiente, la zona 5 que incluye San Andrés, Providencia y Santa Catalina. 2009: Luego de 22 años de trabajo minucioso e incesante realizado entre el gremio cúpula, los funcionarios de la cuenta parafiscal, los comités regionales, los entes nacionales y regionales, y de los ganaderos del país, Colombia logró la certificación como país libre de fiebre aftosa de parte de la OIE, para sus 1.141.338 km2 y los 23 millones de cabezas que componen el hato nacional. Se conserva una Zona de Alta Vigilancia (ZAV) en Arauca y Vichada, en la frontera con Venezuela, debido al contrabando de ganado que llega desde este país que aún no ha podido erradicar el virus. La reaparición de la aftosa Durante 8 años, Colombia gozó del estatus sanitario. Pasó de tener hasta 817 focos de aftosa en 269 municipios en 1989, a 0 una vez alcanzó el estatus. Aunque se describió un foco en Ipiales (Nariño), rápidamente recuperó su estatus en marzo de 2010. Fedegán advirtió desde ese entonces el riesgo que representaban los países vecinos de Ecuador y Venezuela, que registran altos niveles de endemismos, y pidió a organismos internacionales de sanidad animal que estructuren planes para erradicar el virus en estos países. Con esta amenaza latente, en diciembre de 2015 el Gobierno de ese momento le arrebató al gremio cúpula la administración del FNG y la entregó a una entidad sin experiencia en el manejo de la vacunación, y luego liquidó el Fondo, acabando con el equipo técnico que logró la acreditación de país libre de vacunación. Si bien los ganaderos de todo el país, especialmente los comités regionales, denunciaron las graves fallas, el Ministerio de Agricultura hizo caso omiso a estas preocupaciones y mostraron resultados exitosos de campañas que ya no eran manejadas por Fedegán y el FNG. La misma voz de alerta la hizo el presidente ejecutivo de la federación, José Félix Lafaurie Rivera, en julio de 2016 en la 13 reunión de la Comisión Hemisférica para la Erradicación de la Fiebre Aftosa, COHEFA. Allí sostuvo que el estatus sanitario estaba en riesgo por cuenta de los cambios en la administración del Fondo y la operación del ciclo. Aunque le llovieron críticas, empezando por el ministro de Agricultura de la época, el tiempo le dio la razón y un año después, el país se enfrentó a los primeros focos de fiebre aftosa después de 8 años. (Lea: Los logros de Colombia contra la fiebre aftosa a lo largo de 30 años) Colombia recuperó su estatus en diciembre de 2017 pero lo volvió a perder en septiembre de este año, tras la aparición de nuevos focos. Por este motivo, los ganaderos claman para que Fedegán retome la administración del fondo parafiscal (que ahora se llama Cuenta Nacional de Carne y Leche), con el fin de recuperar la confianza y lograr consolidar el estatus sanitario que, por ahora, está en el limbo.