Un estudio realizado por Proexport Colombia estableció una hoja de ruta para que el país sea uno de los principales proveedores del mundo en los próximos 10 años.
Explorar las oportunidades que ofrecen los mercados internacionales es el mejor camino para fortalecer el sector cárnico colombiano, aumentar su calidad y garantizar su viabilidad económica en el largo plazo.
Esta fue una de las principales conclusiones de un estudio que realizó Proexport Colombia con la consultora uruguaya CPA Ferrere, con el objetivo de establecer una ‘hoja de ruta’ que le permita al país posicionarse como uno de los principales proveedores de carne en el mundo.
“Los estándares internacionales son el camino que han seguido los países más exitosos como Australia, Nueva Zelanda y Uruguay. La exportación es la mejor opción para desarrollar las cadenas de carne, hacerlas más modernas, eficientes y sofisticadas, proceso en el que Proexport Colombia es un aliado de los empresarios porque conocemos los mercados y las oportunidades que ofrece el comercio exterior”, señaló la presidenta de Proexport Colombia, María Claudia Lacouture.
La investigación, que les fue presentada a los empresarios del sector durante el II Seminario Internacional del Sector Cárnico Bovino organizado por el Fondo de Estabilización de Precios, Fep, de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, en la ciudad de Montería, enfatizó en la importancia de sacar al mercado productos con valor agregado. (Lea: Colombia: 11 TLC, 5 acuerdos parciales y cero admisibilidad sanitaria)
La ‘hoja de ruta’ busca ir más allá del corto plazo, es decir en los retos inmediatos de acceso a los diversos mercados y al desarrollo de tecnología industrial de frío para conseguir así productos básicos exportables como la carne congelada.
“El objetivo es que tanto el sector público como privado tomen decisiones de inversión a largo plazo para llegar, por ejemplo, a exportar carne enfriada de cortes de alto valor y ya lista para su consumo”, enfatizó Lacouture.
Los retos del sector
Entre los desafíos está apostar por procesos tecnológicos más complejos en productos cárnicos y que la carne colombiana se diferencie en el exterior, para que sea identificada como un producto hecho en Colombia.
El estudio propone tomar acciones en los planos productivo, comercial e institucional, para así lograr en 10 años, duplicar la capacidad productiva.
Colombia exportó USD$62,6 millones en 2012, según datos del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, con cifras del Departamento Administrativo Nacional de Estadística, Dane. Entre enero y septiembre de 2013, se totalizaron USD$142,4 millones, mientras que en el mismo periodo de 2012 llegaron a USD$36 millones. (Lea: ¿En qué va proceso de admisibilidad sanitaria para exportar carne a EU y Canadá?)
De acuerdo con Augusto Beltrán, secretario técnico del Fondo de Estabilización de Precios, FEP, la tendencia en Europa, en cuanto al consumo de carne, viene a la baja, debido esto a la crisis económica que viven en Grecia y España que tiene asustados a los demás países, razón por la cual, el ingreso per cápita ha bajado, lo mismo que el consumo. Sin embargo, en búsqueda de otras oportunidades comerciales, aparecen en el mapa opciones como Corea del Sur y Rusia.
“Le estamos apuntando al mercado de Oriente Medio, debido a los altos ingresos que reciben sus habitantes y están cambiando el consumo de carne de búfalo por el de res, lo cual nos beneficia”, agregó Beltrán.
Las importaciones hacia Medio Oriente y África se están consolidando, lo que falta es la admisibilidad del estatus sanitario que tiene el país, que es libre de aftosa con vacunación, lo cual permitiría a los ganaderos ser competitivos y mejorar sus finanzas.
“Hemos adelantado conversaciones con Angola, Israel y Emiratos Árabes Unidos, donde hay alto interés por comprar la carne colombiana, además la tasa de cambio es muy baja y eso también les favorece a ellos y a nosotros nos abre otro mercado”, culminó el funcionario del FEP.
El potencial colombiano
Dos factores determinarán el futuro del sector cárnico del país: el potencial como productor y la creciente demanda del mercado internacional.
Según datos de Fedegán, el país cuenta con el cuarto hato ganadero más grande de América Latina, después de Brasil, Argentina y México, con 23,5 millones de cabezas, y se ubica entre los primeros 13 productores a nivel mundial.
Pero el mayor potencial está en la posibilidad de expansión productiva con áreas nuevas de pasturas disponibles, favorable debido a que “el aumento de los precios de los granos, fundamentalmente el maíz por su utilidad en biocombustibles, ha presionado por un uso más eficiente de los recursos de alimentación animal”, indicó el estudio de Proexport Colombia. (Lea: Colombia: Con Mundial de Fútbol, pero sin admisibilidad sanitaria)
Además, la posición geográfica del país permite que el ganado pueda ser alimentado con pasto durante todo el año, sin el uso de hormonas ni promotores de crecimiento y respetando el ciclo natural de desarrollo y engorde del animal, lo que permite, de acuerdo con el gremio bovino, “producir carnes limpias, biológicas y orgánicas de gran demanda en los mercados internacionales”.
La investigación de Proexport arrojó como conclusión que Asia y África son los continentes en donde se producirá la mayor expansión de la demanda.
Hoy ya están jugando un papel protagónico como compradores de carne bovina, pues entre los mayores importadores del mundo durante 2012, según cifras de Trademap, se ubicaron China, Corea del Sur, Egipto y la Unión Europea, que son los mercados que presentan las mayores oportunidades para las exportaciones colombianas, sujetas a los protocolos de acceso. En un segundo nivel están Canadá, Chile, Venezuela y México.