El proyecto Cattlechain 4.0 ha mostrado soluciones nuevas para que los ganaderos de Europa se adapten mejor a las grandes cantidades de animales y a la vez, garanticen la plena transparencia de la cadena de suministro.
De acuerdo con el portal de Cordis.Europa, la nueva generación de ganaderos puede fácilmente sentirse como si se encontraran entre la espada y la pared, pues seguir siendo rentables significa fomentar explotaciones agrícolas aún más grandes y gastar mucho en equipos de agricultura de precisión para supervisar de cerca la calidad de los productos lácteos y la carne.
Esta se trata de una presión suficiente como para desalentar a los aspirantes a ganaderos, pero también de una obligación para aquellos que dan el salto, siendo estos los que pueden satisfacer la sed de los consumidores y los gobiernos de transparencia y trazabilidad en la cadena de suministro.
Con este nuevo proyecto Cattlechain 4.0, Carlos Callejero y su equipo apostaron por los nuevos algoritmos y dispositivos de internet de las cosas (IdC) con el fin de ofrecer una solución fiable y rentable que sea capaz de supervisar de forma constante cada animal. Su tecnología, que ha sido validada en escenarios con hasta cinco mil vacas, cambia por completo la manera en que se gestiona el ganado. (Lea: Inteligencia artificial por naturaleza)
De acuerdo a este empresario, “combinamos dispositivos de IdC como collares, crotales y sensores externos que pesan a los animales y miden la cantidad de agua que consumen. Nuestros algoritmos comprueban los siguientes parámetros sobre el bienestar animal: acceso a los alimentos, acceso al agua y nivel de actividad, es decir, estrés del animal”.
Agrega que en esta ultima instancia, algunos de los algoritmos desarrollados funcionarán desde los mismos dispositivos y, por lo tanto, ofrecerán un tratamiento de la información lo más cerca posible de la fuente. En definitiva, se puede esperar un futuro con dispositivos inteligentes del IdC que captarán información más valiosa. (Lea: Inteligencia artificial también beneficia al agro)
Según Callejero, “hemos trabajado en tres herramientas, cada una con su propia finalidad. Una herramienta para supervisar la cantidad de tiempo que un animal ha estado en el exterior pastoreando, una herramienta que alerta a las explotaciones agrícolas cuando el animal bebe menos agua de lo que debería o si ha estado ganando menos peso del previsto, y una herramienta para supervisar los niveles de estrés y activar notificaciones cuando son inusuales”.
Las tecnologías de este proyecto ya están listas. Se comunican entre sí y han sido probadas para minimizar los costos generales de la supervisión del rebaño. Asimismo, se ha desarrollado con éxito una nueva generación de algoritmos que utilizan inteligencia artificial para obtener más información sobre el estado del animal. Se prevé que todo eso aumente de rentabilidad de los rebaños más grandes.
A nivel de cadenas de bloques, el empresario menciona que “diseñamos una herramienta que ofrece a los consumidores información exhaustiva sobre la trazabilidad de los productos cárnicos. Esta herramienta ha sido validada con diferentes explotaciones agrícolas que venden productos directamente a los consumidores. Al comprar carne, se obtiene información valiosa como el lugar de origen, los certificados de bienestar animal.