La sequía es un fenómeno climático que puede tener un impacto devastador en la industria ganadera. Esta situación no solo afecta la disponibilidad de forraje y agua, sino que también puede disminuir drásticamente los índices de preñez en el ganado, lo que a su vez afecta la producción de terneros.

En este artículo, CONtexto ganadero explora una serie de recomendaciones basadas en el asesoramiento de especialistas del INTA (Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria) para evitar la disminución de la preñez en momentos de sequía. Estas estrategias incluyen priorizar por categoría, clasificar por condición corporal, destetar de forma anticipada y aplicar tratamientos hormonales, entre otras medidas.

Priorizar por categoría

Uno de los primeros pasos para mantener una buena tasa de preñez durante la sequía es priorizar el manejo del ganado según su categoría. Los animales gestantes deben recibir una atención especial, ya que su preñez puede ser especialmente vulnerable a las condiciones adversas. Separar a las vacas preñadas de las que no lo están y brindarles un manejo adecuado es esencial para asegurar que reciban la alimentación y el cuidado necesarios.

Clasificar por condición corporal

La evaluación de la condición corporal de las vacas es otra herramienta fundamental para mantener altas tasas de preñez. Durante la sequía, es común que los animales pierdan peso y condición corporal debido a la falta de forraje de calidad. Identificar a las vacas que están perdiendo peso de manera significativa y tomar medidas para mejorar su condición es crucial. Esto puede incluir proporcionar suplementos nutricionales específicos para recuperar su estado físico.

Destetar de forma anticipada

Una estrategia eficaz para preservar la preñez en ganado durante la sequía es el destete anticipado. Esto implica separar a los terneros de sus madres antes de lo previsto, lo que alivia la demanda de lactancia de las vacas y les permite conservar su energía y condición corporal. Al implementar esta práctica, se puede reducir la presión sobre las vacas gestantes y aumentar sus posibilidades de mantenerse preñadas.

Aplicar tratamientos hormonales

En algunos casos, la aplicación de tratamientos hormonales puede ser una estrategia efectiva para mejorar la preñez en momentos de sequía. Consultar a un veterinario o especialista en reproducción animal para determinar la viabilidad y la adecuación de estos tratamientos es fundamental. Los tratamientos hormonales pueden ayudar a sincronizar el ciclo reproductivo de las vacas y aumentar las posibilidades de concepción.

Respuesta de los productores ante la sequía

Es alentador destacar la capacidad de respuesta de los productores ganaderos ante las condiciones de sequía. Aquellos que adoptaron herramientas de manejo en momentos críticos lograron mitigar significativamente el impacto de la sequía en la eficiencia reproductiva de su ganado. Esta adaptación demuestra la importancia de la planificación y la toma de decisiones proactivas en la gestión ganadera.