La nutrición adecuada de las vacas de leche es crucial para mantener su salud y optimizar la producción de leche. A continuación, se detallan los requerimientos nutricionales esenciales para el ganado lechero, basados en la guía “Guía para la alimentación y nutrición del ganado lechero” y la experiencia práctica de la ganadería La Indiana, ubicada en El Rosal, Cundinamarca.
Consumo de materia seca
El consumo de materia seca (MS) es uno de los factores más críticos en la alimentación de las vacas lecheras. La cantidad de MS que una vaca puede consumir depende de su peso vivo y su nivel de producción. En promedio, una vaca consume alrededor de 3 kg de materia seca por cada 100 kg de peso vivo, lo que equivale aproximadamente al 3% de su peso corporal. Sin embargo, este consumo puede variar significativamente:
Vacas de alto rendimiento: Estas vacas pueden consumir más de 4 kg de materia seca por cada 100 kg de peso corporal.
Vacas en seco: Consumen entre 2 y 2.25 kg de materia seca por cada 100 kg de peso corporal.
Calidad del forraje y proporción de concentrado
La calidad del forraje influye directamente en la proporción de concentrado necesaria en la dieta de las vacas. Según la guía, si el forraje es de buena calidad, el consumo de energía es más alto y la proporción de concentrado puede ser alrededor del 40% del total de la dieta. Por otro lado, si el forraje es de calidad regular, el porcentaje de concentrado en la dieta aumenta al 60% de la materia seca total.
Estrategias para optimizar el consumo de materia seca
Para maximizar el consumo de materia seca y mejorar la eficiencia alimenticia, se recomienda:
- Fraccionar la ración total distribuida durante el día.
- Proporcionar dietas más concentradas en energía durante el verano y la primavera.
- Utilizar raciones únicas o totalmente mezcladas (TMR).
- Colocar sombras en los comederos para hacer más cómodo el acceso al alimento.
Experiencia de la Ganadería La Indiana
La ganadería La Indiana en El Rosal, Cundinamarca, ha implementado estrategias basadas en estos principios y ha compartido su experiencia práctica. Según su testimonio:
Ración diaria: Las vacas reciben 12 kg de silo, 2 kg de harina de maíz, 2 kg de palmiste y 1 kg de heno, todo mezclado en una mixer y complementado con sales minerales.
Ordeño: Durante el ordeño, se les proporciona concentrado según su producción de leche. Vacas que producen más de 40 litros diarios reciben 8 kg de concentrado, mientras que aquellas que producen entre 15-18 litros reciben alrededor de 3 kg de concentrado.
Secado: Para las vacas en proceso de secado, la cantidad de concentrado se reduce gradualmente a 1-2 kg diarios para mantener una producción de aproximadamente 10 litros de leche.
En cuanto al manejo de pasturas, La Indiana utiliza kikuyo y raygrass, con una rotación de aproximadamente 41 días, ajustada según las condiciones ambientales. Además, se realiza abonado y control de plagas para mantener la calidad del forraje.