Temas como la sequía, el censo nacional, Famcriollo, la declaración de las razas bovinas criollas y colombianas, entre otros, serán claves en este 2016 para el gremio, que busca consolidarse como uno de los más representativos nacional e internacionalmente. En diálogo con CONtexto ganadero Enrique Rubio Ramírez, presidente de la Asociación de Criadores de Razas Criollas y Colombianas, Asocriollo, aseguró que 2016 será un “año espectacular” para el gremio, porque se llevarán a cabo varias actividades que beneficiarán a los productores. “Con el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural vamos a realizar un censo nacional de todas las razas criollas y colombianas en el país, vamos a buscar animales desde La Guajira hasta el Amazonas, pero primero fortaleceremos las mesas técnicas de las diferentes especies, para que cada una sepa cuáles son las diferencias entre los bovinos. Pensamos iniciar este proceso en un mes”, aseguró el dirigente gremial. (Lea: Razas criollas colombianas tienen tasa de fertilidad superior al 85 %) El presidente de la entidad explicó que este proceso es importante para el sector, dado que una vez se conozca el número de animales que hay por cada raza y su grado de pureza, se podrán establecer planes de acción en pro del mejoramiento de las mismas.
Al final, se busca la absorción de animales que no sean totalmente puros, dado que su grado de adaptación no es el mejor. “Son 500 años de adaptabilidad a este medio hostil. Estas razas tienen una ventaja: cuando hay escasez de agua, resisten esas condiciones adversas; sin embargo, hay que alimentarlos. Por eso, uno de nuestros objetivos es recuperar la raza Campuzano, que se da en La Guajira”. Y aunque en el país existan razas criollas y colombianas capaces de resistir a tiempos adversos, desde Asocriollo se promueve la cultura de la prevención, en especial en época de sequía. Según Rubio Ramírez la clave está en mirar de atrás hacia delante. (Lea: La carne de Romosinuano sabe a tierra colombiana y pasturas nacionales) “Tendríamos que haber construido pozos para la cosecha de aguas lluvia, porque cuando el ganadero no tiene ninguna precaución para afrontar el verano es difícil ser competitivo. Los animales son seres vivos y necesitan de comida y agua, si bien es cierto los criollos resisten más y requieren menos cantidades, eso no implica que dejarlos sin esos elementos no ponga en riesgo su subsistencia”, enfatizó el presidente de Asocriollo. Los temas pendientes por ejecutar De acuerdo con el dirigente gremial, en 2015 quedó en la lista de espera el debate en el Congreso de la República sobre la declaración de las razas bovinas criollas y colombianas como patrimonio genético nacional. “El año pasado por el tema de la paz y el plebiscito quedamos en un segundo plano, pero este año ya empezamos nuevamente el contacto con los congresistas para sacar este proyecto adelante. Esperamos que se logre este año, pero hay que tener en cuenta que los tiempos son diferentes. Tenemos que pasar por 5 debates en la Cámara y uno en el Senado”, comentó Rubio. Asimismo, el sector tiene previsto para este año llevar a cabo una conferencia internacional en la cual se den a conocer todas las razas criollas y colombianas, gracias al compromiso al que llegó el gremio en la Federación Americana de Asociaciones de Criadores de Bovinos Criollos, Famcriollo. (Lea: Razas criollas de América constituyen su propia Federación) “Cuando la Asociación asumió la vicepresidencia de la Federación, nos propusimos llevar a cabo esta actividad en la que esperamos contar con expertos académicos y también de productores de países americanos que tengan animales criollos. El costo es elevado y le planteamos el tema al viceministro de Asuntos Agropecuarios (Juan Pablo Pineda Azuero) el tema, quien dijo que iba a informarse sobre el tema y ver la posibilidad de que se realice en el segundo semestre de este año (…) 2016 será el año de las razas criollas”, manifestó Rubio.