El mejoramiento continuo, premisa que debe aplicarse en la producción de bovinos y bufalinos a través de la adopción de procedimientos que propendan por el bienestar, protección, respeto, garantías y trato humanitario, es lo que debe constituirse como el común denominador de la actividad ganadera en Colombia.
Así lo establece el Manual de Bienestar Animal expedido por el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural en octubre de 2020 debidamente firmado por el entonces viceministro de Asuntos Agropecuarios, Juan Gonzalo Botero Botero.
De acuerdo con el manual se deben aplicar de manera disciplinada 12 aspectos puntuales en lo que respecta a las condiciones en las que se deben levantar los bovinos y bufalinos. Se refieren al proceso de adaptación, ofrecer ambientes adecuado con sombra, agua y alimento, instalaciones con pocos riesgos, condiciones de aire y agua, mejoramiento genético, entre otros.
Veamos a continuación cada uno de los debidos requerimientos que incluso son mencionados en el Cuaderno Ganadero que, durante la ejecución del primer ciclo de vacunación contra fiebre aftosa en el país, es entregado en la mano del propietario de cada predio visitado para efectuar la inoculación de bovinos y bufalinos.
Las 12 condiciones
La selección genética siempre deberá tener en cuenta no solamente aspectos productivos, sino también la sanidad y el bienestar de los bovinos y/o bufalinos.
Los bovinos y/o bufalinos escogidos para ser introducidos en nuevos ambientes, deberán pasar por un proceso de adaptación al ecosistema local, siendo conveniente que la elección de la raza se encuentre acorde con el mismo.
Ofrecer ambientes adecuados con disponibilidad de sombra, sitios secos, acceso a agua fresca y alimento y contar con instalaciones para un descanso confortable, movimientos seguros y cómodos, que permitan cambios posturales para su confort.
Las instalaciones deberán diseñarse con el fin de minimizar los riesgos de heridas o traumatismos.
Las instalaciones deberán permitir el agrupamiento social de los bovinos y/o bufalinos, el cual favorece comportamientos sociales positivos y minimiza heridas, trastornos o miedo crónico.
Las condiciones de calidad del aire, temperatura y humedad deberán contribuir a una buena sanidad y bienestar animal.
Los bovinos y/o bufalinos deberán tener acceso a suficiente alimento y agua, de acuerdo con su edad y necesidades, para evitar hambre y sed prolongada y por lo tanto evitar la presentación de malnutrición o deshidratación.
Referidos a sanidad animal
Las enfermedades y parásitos se deberán prevenir y controlar, a través de buenas prácticas de manejo.
Los bovinos y/o bufalinos con problemas de sanidad deberán aislarse y tratarse de manera rápida, o aplicarse sacrificio humanitario en caso de que no sea viable un tratamiento o si tiene pocas posibilidades de recuperarse.
Cuando no se puedan evitar procedimientos dolorosos, el dolor deberá manejarse en la medida en que los métodos disponibles lo permitan.
Relación con las personas
El manejo de bovinos y/o bufalinos, deberá promover una relación positiva entre los humanos y los bovinos y/o bufalinos y no causar heridas, pánico, miedo durable o estrés evitable.
Las personas relacionadas con el cuidado y uso de los animales deberán contar con habilidades y conocimientos suficientes para garantizar que los bovinos y/o bufalinos se traten de acuerdo con estas condiciones generales.