En el ganado bovino, los signos y síntomas de la tricomoniasis son más evidentes en las hembras. Cuando el protozoo entra en el tracto reproductivo de las hembras, puede causar inflamación de la mucosa vaginal y uterina, lo que resulta en la pérdida temprana del embarazo y abortos tardíos.
Aunque las vacas aún pueden concebir durante las primeras semanas de la infección uterina, pueden presentarse otras anormalidades reproductivas como piometra, endometritis o el desarrollo de fetos momificados.
A continuación, el médico veterinario Carlos Alberto Fuentes, quien atendió recientemente una vaca con esta enfermedad, cuenta en diálogo con CONtexto ganadero, como funciona esta enfermedad y sus consecuencias.
Transmisión cruzada de la tricomoniasis bovina entre toros y hembras
De acuerdo con el especialista, la transmisión de la tricomoniasis ocurre durante el período natural de cría, y tanto los toros como las hembras son capaces de infectar al sexo opuesto.
Una vez que un toro está infectado, permanece así de por vida, pero la mayoría de las vacas infectadas eventualmente eliminan la infección.
Durante el apareamiento, los organismos presentes en la superficie del pene quedan en la vagina de la hembra, donde se multiplican e invaden el útero, causando una infección.
Afortunadamente, las vacas pueden eliminar naturalmente la infección, y se recomienda un período de descanso sexual de 120 a 150 días para permitir que se desarrolle la inmunidad.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que el período de inmunidad es corto y no protegerá los embarazos posteriores si la vaca se vuelve a exponer a un toro infectado.
Diagnóstico de la tricomoniasis bovina
“Se realiza a través de pruebas realizadas por veterinarios autorizados. Para los toros, se aplica succión a una pipeta. También se pueden utilizar duchas vaginales con solución salina o lactato de sin conservantes.
También existen opciones de pruebas para el ganado hembra, pero su confiabilidad no ha sido demostrada” dice Fuentes.
Prevención de la tricomoniasis
En cuanto a la prevención, la práctica de manejo más efectiva es sacrificar a todos los toros infectados y reemplazarlos por toros vírgenes certificados, o asegurarse de que todos los toros que prestan servicios a los hatos tengan una prueba negativa de tricomoniasis antes de la reproducción.
Estudios han demostrado que la vacunación del ganado antes de la reproducción aumenta la cría de terneros en hatos infectados con tricomoniasis.