Miguel Sánchez Flores, médico veterinario, expone en Gramse Ganadería Eficiente que el común denominador de los ganaderos manifiesta que saben llevar el proceso de desparasitación de manera adecuada en su predio. Sin embargo, existen muchos errores que se cometen y que se podrían evitar con el manejo idóneo. (Lea en CONtexto ganadero: 5 claves a la hora de desparasitar bovinos )

“Lo que he visto es que se hace de una manera sistemática, que consiste en estar desparasitando periódicamente con el mismo producto, que generalmente es ivermectina. Sin embargo, se hace a ciegas y esto no está bien”, explica Sánchez Flores.

Para el profesional, el hecho que las personas lo hagan de forma sistemática, genera que los productores continúen con el problema de parásitos en las fincas ganaderas.

Por eso, es mejor aplicar una desparasitación estratégica, “que consiste en saber cuáles son los parásitos que tiene el ganado y con base a eso, desparasitar los animales. Esta es la diferencia cuando se hace de manera sistemática, que aquí no se hace a ciegas”, sostiene Sánchez Flores.

Pasos para desparasitar de forma estratégica:

1. Detectar el tipo de parásito: Este punto parece difícil, pero en realidad es más sencillo de lo que parece ya que se puede hacer en campo con algunas pruebas. “Con base a qué parásitos tienen los ganados, se va a escoger el tipo de desparasitante, la dosis, la vía de administración”, explica Sánchez Flores. Este paso necesita el apoyo del médico veterinario de confianza que tenga el productor en la finca.

2. Elección del desparasitante: Con apoyo del médico veterinario, el productor debe decidir cuál medicamento usar, teniendo como base los resultados de las pruebas mencionadas anteriormente.

La idea es que el veterinario diga qué desparasitante usar, las dosis y la vía de administración que pueden ser subcutánea, intramuscular u oral. Sánchez Flores comenta que “este es un paso muy importante porque no hay un solo desparasitante que por sí solo mate a todos los parásitos que puedan tener nuestros bovinos”.

En este punto es importante resaltar que no se debe utilizar el mismo desparasitante por más de cuatro veces porque va generando resistencia parasitaria. (Lea en CONtexto ganadero: Qué se debe analizar antes de desparasitar a los bovinos )

3. Cálculo y compra del producto: Este punto es clave porque la idea es que el ganadero tenga claro cuál es la inversión que va a realizar, porque como dice Sánchez Flores, “si compramos demás podemos guardarlo y usarlo para después, pero si compramos menos es un problema porque ralentizamos el proceso y que los animales bajen de peso porque se exponen al estrés y sol”.

4. Desparasitar (aplicar producto): “Ya que vamos a desparasitar el ganado, es muy importante pesarlo. Sé que es muy difícil si tenemos muchas cabezas de ganado, pero es clave que se haga porque de lo contrario se está sub-dosificando, es decir, dando menos de la cantidad de producto que debemos dar o mucho más”, detalla Sánchez Flores, haciendo referencia que estos se deben aplicar conforme el peso del animal.

5. Verificación de carga parasitaria: En este paso, el productor se puede dar cuenta si todos los pasos anteriores los llevó a cabo de forma adecuada. De acuerdo con Sánchez Flores, hay que verificar si se hizo bien “para saber si estamos eliminando realmente el parasito con el que tenemos problema. Esto lo hacemos por medio de muestras con las que podamos comparar con las pruebas realizadas inicialmente”.

Si el procedimiento se llevó a cabo al “pie de la letra”, se va a reducir la carga parasitaria que tiene el ganado.