Hace menos de una semana, Uruguay celebró los 10 años de haber logrado trazar totalmente su inventario bovino. En Colombia, desde 2004 se está trabajando en la materia y el avance apenas alcanza al 10 % de los animales.   Con un acto en el parlamento uruguayo, se conmemoraron los 10 años de la ley de Trazabilidad Individual Obligatoria. Desde septiembre de 2006 se dispuso que todos los vacunos estuvieran identificados con una caravana electrónica y una visual, buscando garantizar su procedencia. (Lea: Trazabilidad de bovinos demoraría 44 años en Colombia)   Eso le ha permitido a Uruguay ser el único país en el mundo con todos sus semovientes identificados, mientras que el 85 % del hato bovino tiene estatus de trazado. Este avance, le permitió a la nación “charrúa” ganar mercados y ser uno de los principales jugadores en la exportación de carne, ya que así les garantiza a los compradores conocer, no solo el origen, sino la edad y la alimentación que tuvo el animal.   El ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca de Uruguay, Tabaré Aguerre, indicó a través de un portal gubernamental que la trazabilidad es un claro ejemplo de política de Estado, que se ha desarrollado en un proceso y destacó el concepto de "construcción de un bien público".   Sin embargo, mientras los uruguayos celebran 10 años de tener sus hatos trazados e identificados, en Colombia la situación no avanza tan rápido y los resultados no son los más esperanzadores. En 2004, el país empezó a trabajar en la materia y fue Fedegán el designado por el Estado para sacar adelante tal responsabilidad. (Lea: 5 quejas de ganaderos sobre sistema de trazabilidad animal IdentifICA)   El gremio creó Sistema Nacional de Identificación e Información del Ganado Bovino, Sinigán, y logró la suma de un millón 538 mil animales identificados. Sin embargo, tras una decisión del Gobierno actual, se le entregó la responsabilidad al Instituto Colombiano Agropecuario, ICA, tirando por la borda todo el esfuerzo hecho y retrasando el proceso que es vital para facilitar el acceso de la proteína a otros destinos.   Faruk Urrutia Jalilie, excandidato al Senado por el Cesar,criticó en su columna en el portal Kien & Ke la labor que viene adelantando la entidad, ya que a su juicio el “despelote en la autoridad nacional es absoluto”, donde los funcionarios en la capital se vanaglorian de los éxitos de otros. Mientras que quienes están en las regiones son quienes deben trabajar al sol y al agua para lograr identificar a los animales.   En el mismo texto, Urrutia Jalilie, lamentó que el país solo tenga el 5 % del hato previamente identificado, lo que genera dificultades para tramitar documentos como las guías de movilización. “En un departamento cercano, 4 funcionarios intentan identificar un millón 300 mil animales… pobrecillos, demorarán aproximadamente 18 años en conseguirlo; de acuerdo a mis cálculos”, dijo.  (Lea: Trazabilidad animal hace 10 años era un lujo, hoy es una obligación)   De acuerdo con información revelada por el ICA, en 2012, la entidad sanitaria del país se puso como meta trazar 2 millones de animales durante el siguiente año, algo que  no cumpliría, ni siquiera teniendo en cuenta que contó para ello con el Sistema de Trazabilidad, IdentifICA, que se empezó a utilizar ese año.    Pasados 4 años, y a corte de octubre de 2015, ha identificado 2 millones 258 mil 908 cabezas de bovinos y búfalos, lo que indica que se trazan menos de 800 mil rumiantes cada año. Entre 2013 y 2014, el ICA identificó un millón 470 mil 174 bovinos y bufalinos, de acuerdo con datos del Instituto.   Los ganaderos no están satisfechos con lo que ha hecho la entidad hasta el momento, incluso calificaron como “paquidérmica” la gestión de la autoridad sanitaria. Varios de ellos atribuyeron este problema a la falta de funcionarios. (Lea: "Después del clima, el ICA es el mayor problema de los ganaderos": productor)    “El programa de trazabilidad va muy lento, porque el personal que tienen es muy poco. No tengo claro cuántos animales van pero sé que no deben ser más del 20 % de los que hay en el departamento”, aseguró en días pasados Carlos Farelo Pinzón, presidente del Comité de Ganaderos de Ariguaní, Coganar, en Magdalena.   El problema se agrava, según Farelo Pinzón, porque por cuenta de esa gestión los ganaderos de Magdalena no pueden movilizar semovientes a departamentos fronterizos como César y La Guajira hasta que no estén identificados todos los predios del departamento. Esto, por supuesto, es un obstáculo muy grande para los productores que requieren trasladar sus reses hacia esas regiones de forma constante.   Pese a las evidentes dificultades de la entidad, el Ministerio de Agricultura sigue añadiéndole responsabilidades, por lo que los más afectados son los ganaderos que deben soportar los retrasos y demoras. (Lea: ICA, obligado a contratar personal para cumplir ley de trazabilidad animal)