Las vacas realizan 3 tipos de movimientos mandibulares, conozcan cuáles son y qué dicen los estudios para comprobar su relación con el consumo de alimento.

Como explicaron Jiménez Rosales y otros en su investigación, las vacas en pastoreo realizan tres tipos de movimientos mandibulares (MM): bocado exclusivo (B), masticación exclusiva (M) y movimiento compuesto (MC, una masticación y un bocado en un mismo MM).

Cuando las vacas arrancan bocados grandes, aumentan la cantidad de movimientos compuestos, como estrategia para masticar y tomar bocados a la vez, manteniendo una alta tasa de consumo. (Lea: La importancia del tamaño de partícula en la dieta del ganado)

Según los autores, con la disminución de la altura del forraje, por efecto de una defoliación progresiva, reducen su tasa de consumo por la cosecha de bocados más livianos y en consecuencia aumentan las cantidades de MM, compensando parcialmente la reducción del consumo.

En otro trabajo, explicaron que los movimientos inician con la obtención del bocado se define como la colocación de forraje en la boca y su desprendimiento del resto de la planta por movimientos de la boca y de la cabeza. (Lea:Prevenga la actinomicosis, cáncer que afecta la mandíbula del ganado)

Con movimientos de los labios, lengua y mandíbulas, la vaca hace la aprehensión y acomodo del bocado dentro de la boca, y con movimientos de la cabeza tensiona para romper el forraje. Durante esta operación, los bovinos utilizan la lengua para introducirlo en su boca y para ampliar el área de bocado.

La tasa de bocado (TB) está determinada por los movimientos mandibulares que son diferenciados con equipos que registran señales mecánicas o acústicas. Los movimientos compuestos han sido identificados exclusivamente con el análisis acústico. (Lea: Conozca la cronología dentaria de los bovinos)

También se han hecho estudios sobre la dirección del movimiento de la mandíbula. Como recordaron Bungo y otros, la mandíbula inferior muestra un movimiento rotatorio en la actividad masticatoria de los rumiantes, mientras que la masticación implica un movimiento horizontal para moler las fibras.

Sin embargo, en su trabajo de 1999 indicaron que poco se sabe acerca de la dirección de este movimiento durante la rumia, donde la materia vegetal del bolo es triturada por los molares. En un ensayo preliminar, encontramos que el movimiento de la mandíbula masticatoria durante la rumia estaba regulado en términos de dirección.

A partir de este estudio, se sugirió que el ganado lechero tiende a mostrar un movimiento mandibular en una dirección unidireccional constante, ya sea hacia la izquierda o la derecha, al volver a masticar la mayor parte de los bolos durante un periodo de rumia determinado, pero hubo casos en los cambió la dirección del movimiento mandibular entre periodos de rumia.