En el trópico bajo colombiano al lograr este precepto de los cruces genéticos, la ganadería contará con hembras que registren una mayor producción de leche, de lo contrario, serán menos resistentes y se requerirán manejos más especializados para lograr que sean productivas.
Lo recomendable en el cruzamiento de razas, cuyo propósito es mejorar u optimizar el desarrollo genético de las hembras y especializarlas en lechería en el trópico bajo, es conservar el 50 % del componente cebuino y el 50 % del taurino.
Así lo manifestó Hernando Barahona, médico veterinario, experto en manejo de cebuinos lecheros y director nacional del programa Embriogan de Fedegán, en el Facebook Live del 24 de agosto de 2020 evento en el que trató el tema del manejo bovino durante el preparto y, en el cual, se refirió precisamente a los cruces genéticos. (Lea: ¿Qué debe evaluar durante el preparto?)
De acuerdo con Barahona, en muchas explotaciones se comenzaron a hacer cambios importantes en la genética de las vacas y en esta labor generalmente han optado por tener diferentes tipos de cruzamientos.
Con los cruces realizados por algunas ganaderías en el trópico bajo del territorio colombiano, se ha logrado apenas producir ganado siete colores sin obtener un mayor avance en el tema del mejor comportamiento en la producción de leche.
“Para aquellos que se especializan en la producción del vitamínico alimento, lo recomendable es trabajar el cruce del 50 % con cebuinos lecheros, y en este caso se pueden realizar con las razas Gyr, Guzerat y Red Sindi”, aseguró.
El director de Embriogan recomendó adicionalmente que en el respectivo cruce se puede gestionar el otro 50 % con cualquier raza europea también de producción lechera como la Holstein, Jersey o Ayrshire, entre otras. (Lea: Heterosis del cruce Gyr x Holstein: una herramienta genética para producir leche en el trópico)
En ningún caso es recomendable salirse del 50 % ni en el origen cebuino ni en el taurino, solo así se logrará un óptimo desarrollo genético y mejores resultados en lo referente a la estructura del animal y su respectivo volumen así como en lo que se refiere a las vías mamarias. (Lea: Cómo el cruce Gyr - Girolando ha mejorado este fenotipo en Brasil)
En concepto del experto en los casos en los que se trabaja con 62.5 % de componente genético taurino y 37.5 % de cebuino, esto es, 5/8 por 3/8, los animales resultan de menor resistencia.
“En dicho caso se requerirá un manejo más especializado para que las hembras puedan ser más productivas”, puntualizó Barahona.