El consumo voluntario de alimentos muchas veces se puede limitar y reducir en los bovinos, razón por la que el productor debe saber sobre los factores que inciden en el proceso. Conózcalos.
En el canal de Youtube llamado InfoAgrícola GT se expone que hay factores que son determinantes en el consumo voluntario de los vacunos, encontrando que algunos de estos dependen del estado fisiológico, organismo, alimento y medio ambiente en el que se encuentre inmerso el animal. (Lea: El consumo voluntario, clave en el cuidado de los animales)
En los bovinos, la presencia de alimento en el tracto digestivo estimula una variable gama de receptores químicos, mecánicos y de temperatura, por lo que posteriormente esta información es trasladada al sistema nervioso central del semoviente.
Sin embargo, existen factores que son inherentes a los animales. Para ser más exactos, en el sistema nervioso central el consumo de alimento por parte de estos se encuentra definido por mecanismos fisiológicos que llevan al animal a realizar el consumo de alimentos de acuerdo a los requerimientos y necesidades, fase que es controlada por el hipotálamo que está ubicado en el área central del cerebro.
Cuando este organismo es estimulado en el área lateral, se inicia el consumo de alimentos, pero cuando es destruido se produce lo que es conocido como afagia, por esta razón esta zona es denominada como el centro del hambre.
Uno de los factores importantes son los neuropéptidos que están involucrados en la interface reguladora del balance de energía y el control del consumo alimenticio, en donde la dinorfina, endorfina y metaencefalina son las encargadas de estimular este consumo.
Otro de los factores fundamentales son las hormonas como la adrenocorticotrópica (ACTH), insulina, leptina, grelina las esteroideas y la del crecimiento están involucradas en la estimulación del consumo a corto plazo. También se encargan de regular ingestión del alimento a través de diferentes mecanismos. (Lea: ¿De qué se trata el Consumo Residual de Alimento o Residual Feed Intake?)
Los ácidos grasos volátiles también juegan una función clave porque cuando estos llegan a niveles altos, el fluido ruminal y de la motilidad reticulorjmial, el propiono y el acético afectan directamente el pH y a la presión osmótica, que a su vez afecta la motilidad rumial de los vacunos, por eso si el pH rumial baja, hasta valores de 5 a 0, el rumen se paralizará.
El estado fisiológico de los bovinos es muy complejo, por tal motivo se debe considerar el balance de nutrientes en dos niveles. El primero en el rumen con el objetivo de maximizar la tasa de crecimiento microbiano y los segundos son los nutrientes absorbidos por los vacunos en función de los requerimientos.
Cuando los bovinos están en etapa de crecimiento estos van modificando el consumo para ajustarlo según los requerimientos. Por eso, en esta etapa los bovinos presentan mayor consumo de alimentos por unidad de peso metabólico. Por su parte, en terneros, el consumo aumenta proporcionalmente de acuerdo a la digestibilidad del alimento, por lo tanto, el crecimiento compensatorio que se da cuando hay periodos de abundancia después de escasez depende del aumento del consumo voluntario de los vacunos.
Otro de los factores claves es la gestación, pues debido a los requerimientos de energía, las vacas en gestación aumentan sustancialmente el apetito por tenencia del feto, esto genera que el consumo voluntario disminuya en el último mes pues pasan menos tiempo alimentándose.
En ese orden también está la lactación, pues las vacas generalmente logran la madurez a los seis o siete años de edad cuando la nutrición proporcionada es la adecuada, es por eso que en las primeras dos o tres lactaciones esta sigue creciendo teniendo en cuenta que cuando un animal aumenta de tamaño, también lo hace su ingestión.