Para Rafael Hernández, presidente de la Federación Nacional de Arroceros, una de las grandes metas para 2014 es la consolidación del programa tecnológico Amtec.

El sector arrocero de Colombia, a pesar de las protestas campesinas que se registraron en 2013, mantuvo una estabilidad que le permitió obtener márgenes económicos y productivos importantes, logró seguir implementando su programa de transferencia de tecnología y alcanzó importantes cifras en materia de importación de arroz.

“Haber logrado con la industria una franja de precios al iniciar el año, con el apoyo del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural permitió que los productores tuvieran más tranquilidad, en especial porque no sabían qué iba a pasar durante la cosecha. Además logramos que los arroceros tuvieran acceso a créditos de ICR para poder comprar maquinaria y establecer el Amtec”, afirmó Rafael Hernández, presidente de la Federación Nacional de Arroceros. (Lea: Definen precios que se deben pagar a productores de arroz)

Hernández también explicó que con el proyecto Amtec, que se empezó a implementar en 2012, se ha conseguido una reducción del 33% en los costos de producción por hectárea y un rendimiento de hasta dos toneladas, “eso quiere decir que una tonelada del grano puede ser igual o más económica que las que se importan de otras partes. Eso es competitividad”, señaló el dirigente.

De igual forma, con una inversión de $60 mil millones por parte del Gobierno Nacional se sacaron del mercado 500 toneladas de arroz. “Con eso, si le sumamos las importaciones del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos; Perú y Ecuador y el contrabando, el país se hubiera inundado del cereal. Es una respuesta del Gobierno que hay que reconocer”, añadió.

Sin embargo, pese a los logros que el sector y el gremio han obtenido, temas como el establecimiento de infraestructuras siguen obstaculizando la labor de productividad de los arroceros, que según Hernández, son cosas que no dependen de ellos, sino del Gobierno Nacional, para hacerlo directamente, o a través de asociaciones público - privadas.

Los paros y el Gobierno Santos

En el momento en el que el país convivía con las protestas de campesinos de diferentes zonas del país, ante una falta de garantías estatales para la producción, sectores productivos como el lechero, el papero y el arrocero, entre otros, recogían la cosecha de la temporada. Con los bloqueos de vías muchos productores se vieron afectados al momento de transportar estos productos, a tal punto que algunos tuvieron que ser regalados. (Lea: Diversos sectores agropecuarios reclaman al Gobierno por falta de apoyo)

“Me parece que los paros afectaron la institucionalidad del país y de los gremios en general, lo cual a nosotros nos deja muchas dudas porque no hay una política clara, hay intenciones, pero eso no se ha consolidado en una estrategia en la cual participemos los gremios. Además fue perjudicial tener tres ministros en un año porque se rompió la continuidad en cualquier política; cada quien viene con su propia orquesta y eso no ha sido bueno, califico esos hechos como un desatino”, comentó el presidente de Fedearroz.

En medio del TLC, contingentes de arroz entran pero no salen

En 2013 ingresaron contingentes de 82 mil 500 toneladas de arroz blanco, según Rafael Hernández. “Aquí el logro fue haber dividido esa llegada en 3 contingentes a lo largo del año, para que no coincidiera con las épocas de cosecha, ni fuera masiva la importación. Sin embargo, nosotros no hemos exportado nada porque no somos todavía competitivos”, explicó.

Por eso, al mencionar un acuerdo o desacuerdo frente a los Tratados de Libre Comercio, el dirigente gremial indicó que la posición del sector es clara: “no somos enemigos de los TLC, sino de la forma en cómo se han negociado porque se sacrificaron los granos y los lácteos y el balance no es bueno”. (Lea: "A la ruralidad colombiana le falta inversión del Estado": R. Hernández)

Paz, políticas estatales, institucionalidad gremial y el futuro arrocero

Con la inclusión de la población rural en aspectos como el empleo, la educación y el mejoramiento de los servicios, teniendo el apoyo del Gobierno Nacional el país lograría la paz, según Rafael Hernández, quien también le dijo a CONtexto Ganadero que todo se alcanzaría con el establecimiento de políticas agropecuarias de Estado a largo plazo.

“Es necesario gestionar un programa de infraestructura para establecer distritos de riego, con el apoyo de los gremios y ver lo que el Gobierno quiere y los productos que quieren o no, y así sustituirlos a través de políticas efectivas. Hay que lograr que los productores nacionales sean más competitivos y no pedir tantos subsidios. El problema es que no se sabe para dónde vamos”.

De igual forma aseguró que la institucionalidad gremial no se vio afectada tras el surgimiento de las Dignidades Agropecuarias. Para ello, se llevaron a cabo 19 asambleas en las regiones productoras a las cuales asistieron más de 7.500 arroceros quienes ratificaron la unión del sector.

“Si logramos irnos por la brecha de conseguir la competitividad y el apoyo del Gobierno, estoy seguro que en tres o cuatro años el sector mejora”, puntualizó el dirigente gremial.