Esta enfermedad es muy frecuente por los imbalances minerales que se presentan, muchas veces se da por el exceso de fosforo, los cuales derivan problemas como la deficiencia de calcio en los animales.
Los ganaderos deben conocer la importancia sobre los requerimientos de nutrientes que necesita el ganado para así determinar cuando existen deficiencias o excesos que puedan derivar enfermedades en los animales.
Humberto Guáqueta, Médico Veterinario, PhD y especialista en Reproducción Bovina y Salud de Hato, habló con CONtexto ganadero acerca de esta enfermedad, el tratamiento y tipos de tratamientos adecuados, y la prevención con el fin de evitar afectaciones en los animales.
La hipocalcemia
Es una enfermedad que se manifiesta de la siguiente forma:
Hipocalcemia clínica: se identifica cuando la vaca esta caída, no se puede parar. Popularmente se le dice fiebre de leche, porque afecta mayoritariamente a las vacas recién caídas.
Hipocalcemia subclínica: aunque la vaca no esta caída, presenta niveles bajos de calcio en la sangre.
¿Qué es un imbalance minerales?
Según Guáqueta “una vaca tiene que tener mínimo el nivel de calcio dos veces más arriba que el de fosforo. Es decir la relación de calcio debe ser 2 a 1”.
¿Cuánto calcio debe tener una vaca?
Una vaca normal debe tener entre 8 y 12 miligramos por decilitro de calcio en la sangre.
Cuando se encuentran entre 5.5 y 7 tienen hipocalcemia subclínica, no están caídas, pero si está afectado su metabolismo debido a que el organismo funciona a través del calcio. (Lea: Evite la hipomagnesemia en vacas)
Diagnóstico:
Cuando hay deficiencia de calcio, los músculos no presentan movimientos, por tanto no hay buena digestión, desplazamiento y tonicidad para caminar, actividades vitales del organismo, enfatizó el experto.
En el caso de las vacas paridas, cabe resaltar que se necesitan mayores cantidades de calcio para la síntesis de la leche.
Por cada litro de leche que una vaca produzca, necesita 2 gramos de calcio, sin embargo, una vaca de alta producción lechera necesita mucha más producción de calcio.
Cuando no se administra un buen manejo nutricional antes de tener una cría “las demandas metabólicas de calcio exceden lo que está aportando el organismo y por eso se caen”.
Existen dos formas de diagnóstico profesional:
- Tomar muestra de sangre y enviar al laboratorio: Los resultados deben tener más de 8 miligramos por decilitro de calcio en la sangre.
Los signos que alertan en una vaca parida son la debilidad muscular, trastornos en los movimientos, tremores musculares o músculos que tiemblan. Muchas vacas que caen, no cuentan con suficiente calcio que les de fuerza y potencia en los músculos para levantarse, es por esto que se les conoce como vacas caídas o fiebre de leche.
- Medición del ph en la orina: esta herramienta y procedimiento diagnostico sirve para predecir si las vacas van a tener problemas de hipocalcemia. Este debe ser realizado aproximadamente 2 semanas antes del parto.
“Si el ph esta alcalino, es decir, si está por encima de 7.5, 8, 8.5 es muy posible que la vaca vaya a presentar hipocalcemia. Si está por encima de 9, generalmente el animal se cae, esta con hipocalcemia clínica; con los ph alcalinos, sugieren que la vaca va a tener hipocalcemia. Lo ideal es que el ph este un poco más ácido, alrededor de 5.5 o 6, aseveró el profesional”.
Tratamiento
Existe un tratamiento denominado tratamiento de emergencia, el cual se realiza mediante la aplicación de soluciones intravenosas de calcio, aunque también pueden ser suministradas vía oral. Existen dos productos especiales para este manejo, el gliconato y el buroclonato de calcio.
Prevención
Se debe evitar que las vacas antes del parto consuman dietas altas en potasio o suministrarles calcio, porque el organismo deja de movilizar las reservas, dijo el experto.(Lea: 7 factores que predisponen el desplazamiento de abomaso)
Si el organismo está recibiendo calcio o consumiendo forrajes muy altos en potasio, toda la composición mineral del organismo se cambia y esto predispone a la presentación de la enfermedad. La hormona llamada parathormona es la encargada de regular el calcio y el fosforo, añadió.
Finalmente, se debe controlar la abundancia de fosforo en el suelo. Muchas veces los suelos de fincas cuentan con suficiente fosforo, los cuales además fertilizan con abonos orgánicos o abonos químicos compuestos por el mismo elemento, el cual debe ser regulado en la alimentación animal.
Para procedimientos dentro del hato, se recomienda consultar los expertos.