La hipocalcemia e hipomagnesemia son terminologías que se confunden mucho en el sector ganadero debido a que están relacionadas con dos enfermedades en los bovinos. Conozca las similitudes y diferencias de cada una.

Ricardo Mesa, médico veterinario especialista en Biotecnología en la reproducción con Magíster en Ciencias Veterinarias, indica que en el caso de la hipocalcemia la vaca generalmente está caída o dormida, razón por la cual no se incorpora en el hato ganadero. (Lea: 5 recomendaciones para prevenir y tratar la hipocalcemia)

“La etiología de la hipocalcemia no es muy clara porque es un síndrome porque puede ser una combinación de bajos niveles de calcio con magnesio o podemos estar hablando de una cetosis donde hay una deficiencia de energía importante pero con una sintomatología distinta”, describe Mesa.

La gran mayoría de estas enfermedades metabólicas tienen que ver con deficiencia de calcio o de magnesio, que son las que se presentan con mayor frecuencia en la vaca de leche por eso hay que contribuir a que el animal se recupere.

En el caso de la hipomagnesemia, esta enfermedad también es llamada tetania de los pastos, praderas o transporte y se presenta en vacas de alta producción antes o después de parir, así como también en cualquier estado de la vida productiva y en animales de carne lactantes. Su principal característica es la deficiencia de magnesio.

“El diagnóstico para la hipomagnesemia clásica se puede dar cuando se tetaniza o paralizan los músculos de la cara y la vaca se muestra como si tuviera síntomas nerviosos y con apariencia de ojos salidos. También encuentran al animal con las patas cruzadas en x en los potreros justo antes de parir”, explica Mesa. (Lea: Evite la hipomagnesemia en vacas)

Una vez la vaca continua con estos síntomas, si no se trata puede cambiar de clásica a grave y se dejará de presentar las tetenias a nivel de los músculos de la cara del animal y comenzará a entrar en una somnolencia con salivación, rechinamiento de los dientes por lo cual entra en coma con paso casi inmediato a la muerte.

Una característica de la hipomagnesemia es la diferenciación de la intoxicación con plomo, pero también hay que tener en cuenta que el animal no solo se cae por falta de calcio o magnesio, sino que también puede hacerlo por fracturas de sus extremidades.

Con estas dos enfermedades se pueden presentar trastornos como “prolapso de útero y de vagina, así como la caída al estado de coma o también lo conocemos como cruz de la muerte. El prolapso de útero refleja la debilidad de las paredes porque el calcio y el magnesio tienen trabajo sobre la musculatura lisa”, asegura Mesa. (Lea: ¿Conoce usted las pérdidas económicas de la hipocalcemia?) 

De acuerdo al experto, para que se identifiquen mejor los síntomas, la hipomagnesemia tiene los músculos de la cara del animal paralizados, pero en la hipocalcemia el animal muestra totalmente efectos contrarios debido a que está tranquilo y somnoliento con ojos hundidos.

Hay que buscar productos que contribuyan al calcio y el magnesio, de tal forma que no se convierta en un proceso traumático de músculos en los que la vaca difícilmente pueda levantarse e incorporar a la productividad de la finca.