La osteoartritis equina es una enfermedad que se presenta mayoritariamente por el uso repetitivo de los caballos en fuertes labores del campo y en competencias deportivas. Conozca cuáles son los tratamientos más recomendables para este padecimiento.

La pérdida en el desarrollo físico y genético es una de las consecuencias más frecuentes de la osteoartritis en los equinos, razón por la cual desde la crianza del animal, productores y manejadores deben cuidarlos bajo estrictas medidas para evitar la presentación de la enfermedad, que es considera como una de las más costosas de tratar. (Lea: ¿Conoce cuáles son las consecuencias directas de la osteoartritis equina? )

Héctor Sierra, médico veterinario con experiencia y prácticas en equinos, indica la enfermedad puede pasar por varios niveles de gravedad, por lo que es vital que se haga un diagnostico del animal en el momento en que comience a presentar cojeras.

“Hay dos maneras de afrontar este problema, el primero hace referencia a la prevención la cual consiste en cuidar a los caballos que tengan potencial genético con la ayuda de un equipo interdisciplinario que tenga conocimientos en el manejo de los equinos, es decir, un herrero, un veterinario con experiencia en ortopedia”, explica Sierra.

Estas personas serán las encargadas de acompañar al productor y al animal en el proceso de entrenamiento del animal, por lo cual hay de dejar de lado los beneficios propios y dedicarse a cumplir con los objetivos que se han trazado con el caballo.

Otra manera de prevenir la osteoartritis equina es desde el punto de vista nutricional, en donde los animales deben mantener una dieta basada en pastos nutritivos o forrajes de buena calidad que tengan un buen balance mineral.

De acuerdo a Sierra, la enfermedad es visible en el animal cuando se tienen inicios de sinovitis, para luego pasar por artritis y agravarse con la presentación de la artrosis, por lo cual los tratamientos dependen del punto en que se encuentre el caballo cuando se realice el diagnostico.

“Los tratamientos específicos de la enfermedad son los intraauriculares con antiinflamatorios, sobretodo de origen esteroideos con sustancias llamadas ácidos hialurónicos. En la actualidad es muy frecuente el tratamiento con sustancias autólogas”, explica Sierra. (Lea: Caballo de Paso Fino Colombiano es una raza autóctona y trasfronteriza)

Las sustancias autólogas son provenientes del mismo cuerpo del caballo que se pueden tomar de la sangre, de la médula ósea y otras partes del animal, con las que se preparan fluidos, como los plasmas, ricos en plaquetas para utilizarlas en las articulaciones del equino.

Con esto, se quiere “procurar que se desinflamen los tendones del caballo o volver a retornar al estado inicial del animal. Es importante tener en cuenta que el cartílago nunca sana en un 100 %, por lo que es clave cuidarlo antes que las consecuencias puedan ser peores”, indica Sierra.

De esta forma, el experto ratifica que es importante detectar la enfermedad en sus estados primarios y no esperar a que se presente artrosis, pues este es un nivel muy grave que puede generar un fuerte impacto en el desarrollo del animal.

Por lo consiguiente, Sierra concluye que para evitar la presentación de la osteoartritis equina es importante “cuidar el manejo que se le da al caballo, pues luego que está se encuentre presente en su cuerpo, los gastos en tratamientos y mantenimiento del animal son muy elevados ”. (Lea: Conozca los valores de algunas constantes fisiológicas de los animales)