Este tipo de corrales, en los que se tiene en cuenta el comportamiento animal y las buenas prácticas ganaderas, se están convirtiendo en una valiosa herramienta para el manejo racional y productivo de los bovinos.   Puertas barredoras, calcetas curvas y cerradas, embudos, sumados al manejo respetuoso de los animales pueden facilitar las labores propias de una finca ganadera y evitar accidentes.   El médico veterinario Juan Enrique Toro manifestó que hoy en día muchas construcciones para animales no cumplen los parámetros de las buenas prácticas ganaderas y "generalmente" son realizadas por personas que solo saben pegar madera o soldar. (Lea: Importancia de conocer la conducta animal para el manejo bovino)   Los objetivos de un corral en una finca ganadera deben estar enfocados en lograr manejar el mayor número de ejemplares en el menor tiempo posible y con el menor número de accidentes de humanos y animales, evitar pérdidas de peso y requerir el menor número de trabajadores.   "Para cumplir con estos objetivos se requiere trabajar con la psicología de los animales para que estos tengan la voluntad de transitar por el área o hacia donde se necesite", expuso.   De acuerdo con el también zootecnista, en este tipo de estructuras los embudos deben estar cerrados totalmente para que el animal no tenga mayores distracciones y se dirija a la salida que se dispuso.   En ese sentido, dijo que los espacios que se dejan en las barreras solo sirven para que los animales saquen sus patas, se lastimen a sí mismos o a los empleados. (Lea: 5 factores que alteran el comportamiento de las vacas)   Se recomienda que los corrales no tengan esquinas pues es ahí en donde se acumula el ganado y se dificulta sacarlos. Además es ideal que tengan divisiones para recibir diferentes lotes.   Toro también manifestó que los animales deberían tener forma de salir de la barrera solo con un movimiento de puertas y de esa manera poder distribuirlos en lotes usando criterios como el peso, los preñados y vacíos, entre otros.   El mayor número de accidentes que se producen en un corral se dan por cuenta del uso de trancas, razón por la cual se deberían usar puertas corredizas o barrederas.   Según el manual de Buenas Prácticas Ganaderas del Proyecto Ganadería Colombiana Sostenible, en el caso de la calceta curva, esta tiene ventajas sobre la recta pues evita que el animal vea hacia donde se dirige antes de estar casi adentro (brete, báscula, palpadero o embarcadero), también utiliza la tendencia natural del animal a caminar en círculo alrededor de una persona. (Lea: Bienestar animal, clave para lograr rentabilidad en la ganadería)   Cuando los animales son situados en una calceta de una sola fila, no se les debe forzar a avanzar, a menos que puedan ver un espacio abierto hacia dónde dirigirse. Un animal que rehúsa a moverse una vez, continuará haciéndolo con cierta frecuencia.   Un gran porcentaje de los corrales de las fincas en el territorio nacional tienen graves fallas en el tema de diseño, afortunadamente está aumentado la tendencia de la implementación de los corrales etológicos.   La inversión en un corral etológico, no es mayor que la de uno tradicional. Vale la pena resaltar que contar con un buen diseño puede ayudar a que se reduzcan las pérdidas en disminución de peso y los accidentes y a que se mejore el comportamiento productivo de los animales. (Lea: Bienestar animal: un tema del que se habla mucho y pocos dominan)