Enrique Rimbaud, médico veterinario especialista en sanidad animal, expone que la mortalidad en neonatos por enfermedades puerperales puede presentarse “15 antes del parto y 15 días después de este”.

Basado en ese periodo largo de tiempo, se presentan distintas causas a las cuales el productor debe prestarle atención para no incurrir en pérdidas de vida de bovinos.

De acuerdo con Rimbaud, existen dos razones muy comunes para que se genere una mortalidad de neonatos. La primera causa es “el parto distócico, que significa dificultad en el parto y puede ocurrir por diversas razones como las malas condiciones de manejo del momento del parto, posición fetal anormal, tamaño del ternero, etc”.

Para abordar este parto se debe seguir una observación constante de las vacas preñadas y actuar rápidamente ante posibles dificultades. Además, el productor debe contar con asistencia veterinaria si se sospecha de un posible parto distócico.

La segunda de las causas que menciona Rimbaud es el hambre: “Si la vaca viene con hambre porque el parto se da en pleno verano y no se le está dando de comer adecuadamente, la cantidad de leche que va a producir es poca y eso reduce las posibilidades de vida del ternero”.

Por esa razón, el productor debe considerar que existe un periodo de ordeño de la vaca ideal para que esta no se quede produciendo menos leche, especialmente porque debe alimentar al neonato durante sus primeros meses de vida.

En palabras de Rimbaud, “cuando no hay calostro para darle al ternero, esto se refleja mucho en la salud del animal porque el calostro es fundamental en el desarrollo de la vida del animal. Este calostro se debe suministrar en grandes cantidades las 48 primeras horas para que el ternero tenga sus defensas, vitaminas, minerales, etc”. (Lea en CONtexto ganadero: El calostro, una forma de “vacunar” contra enfermedades al recién nacido)

A estas causas de mortalidad de neonatos se le suma las infecciosas parasitarias originadas por bacterias que afectan a la vaca en su último periodo de parto, generando abortos. Una de estas infecciones es la leptospirosis, que genera un aborto cuando el animal está a punto de nacer y ya se encuentra con todos sus órganos.

La neosporosis es otra de las infecciones parasitarias que se ve influida por los perros en las fincas. Rimbaud dice que “este es un protozoario que lo transmite el perro. Por eso si se tienen perros en las fincas se tienen que desparasitar cada 21 días porque estos animales transmiten tenias, quistes, abortos, entonces si quiero tener un perro debo mantenerlo sano”. (Lea en CONtexto ganadero: ¿Cómo prevenir y controlar la neosporosis bovina?)