Las vacas pueden perder 1 o incluso 2 de sus glándulas mamarias por diferentes circunstancias, lo que afecta la producción de leche. Sin embargo, no es obligatorio prescindir de la res. Identifique el momento de tomar o descartar esa decisión. Las lesiones en los pezones de las vacas por púas, algún instrumento que causa infección o mastitis pueden afectar permanentemente las glándulas mamarias y dejarlas sin producción de leche a cualquier edad de la res. También sucede que las novillas a veces se maman entre ellas los pezones y se produce una leche prematura que puede ocasionar mastitis previa al primer parto. Ante esto, pierden uno de sus cuartos mamarios. (Lea:Crean vacuna para prevenir la mastitis en reses) Ernesto González, profesional en Boyacá de Gestión Productiva y Salud Animal del Fondo Nacional del Ganado, FNG, administrado por Fedegán, explicó que si uno de los pezones deja de producir leche, no necesariamente se debe descartar el animal. Habrá que mirar si con los 3 pezones restantes la vaca produce suficiente leche y si el cuarto mamario perdido se secó por completo para evitar que se contaminen otras vacas o equipos de ordeño con mastitis a raíz de la infección. “Una vaca que en su tercer parto empieza a ser afectada por la mastitis que se convierte en crónica, puede perder su cuarto pezón y producir leche por los 3 cuartos, pero se debe secar (pezón inservible) para que quede en estado improductivo y esa leche no contamine”, puntualizó el médico veterinario del FNG. Esteban de Jesús García Camargo, médico veterinario y profesional en Zipaquirá del FNG, de igual forma señaló que “muchas vacas pierden un pezón por mastitis pero los ganaderos las mantienen porque son excelentes productoras de leche”. La producción de leche por 3 pezones es común en las ganaderías y una vaca holstein puede producir 35 litros con solo estos. Es más, afirmó González, es factible que la res produzca el líquido por solo 2 de los cuartos mamarios sin que se altere el negocio productivo. Aún así, resaltó: “No se deben dejar vacas viejas porque tienden a tener mastitis crónica y contaminan los cuartos de las vacas sanas. Esa es una cuestión a tener en cuenta porque indican al ganadero si toma la medida de descartarla”, anotó el profesional en Chiquinquirá. Fredy Enrique García, investigador Phd de la Corporación Colombiana de Investigación Agropecuaria, Corpoica, en Tibaitatá, consideró que los productores no han dado la importancia necesaria a la ubre de la vaca como la base del sostenimiento en la producción de leche, que parte de su protección para mantenerla sin impurezas y lesiones. Añadió por eso que “se ordeñan pezones limpios, secos y sanos” y se hace pre y sellado de los mismos, es decir se desinfectan con cloro durante 20 segundos para tener un sistema de leche inocuo a fin de evitar descartar vacas que tienen la capacidad de producir el lácteo. (Lea: La ubre, el órgano más importante en la producción de leche) Por consiguiente, la razón principal por la que un ganadero debería descartar una vaca con uno de sus 4 pezones inservibles es que la producción de leche disminuya de forma notoria, presente mastitis incontrolable, lo que puede ir acompañado de la edad adulta o vejez de la vaca, razones que la hacen más vulnerable, porque además presentará dificultad para preñarse.