Esta inflamación en la glándula mamaria, generalmente causada por infecciones bacterianas, puede resultar en una disminución de la producción de leche, cambios en su composición, y en casos severos, pérdida de la funcionalidad de los cuartos mamarios afectados. (Lea en CONtexto ganadero: Mastitis bovina, ¿por qué es difícil de controlarla?)

Allan Napoles, ingeniero agrónomo y zootecnista, explica que existen nuevas técnicas de ordeño que pueden ayudar a la prevención de la mastitis bovina. El uso de las cánulas en el ordeño se da cuando “una vaca tiene mastitis, pues el esfínter de la ubre se tapa, entonces se tiene que usar algo manual para abrirse camino entre ella”.

Esto quiere decir que las cánulas de ordeño son dispositivos que se introducen en el canal del pezón para facilitar el drenaje de la leche, especialmente en casos donde la inflamación severa dificulta el ordeño regular.

Estas cánulas pueden ser utilizadas tanto en situaciones agudas como crónicas, ayudando a aliviar la presión dentro de la glándula mamaria, lo que a su vez, reduce el dolor y el malestar en la vaca.

Sin embargo, estas herramientas solo se pueden utilizar en animales enfermos, pues “si se usan en bovinos sanos, lo único que se hará es abrir más el esfínter y propiciar que puedan entrar bacterias. Además, es una técnica que implica que se use vaca por vaca, pues si se usa en una y en otra, se van a contagiar”, expone Napoles.

Existen varios tipos de cánulas en el mercado, desde las más simples, hechas de plástico o metal, hasta las más sofisticadas que incluyen un sistema de válvula para controlar el flujo de leche. La elección del tipo de cánula depende del grado de la mastitis, la severidad de la inflamación y las preferencias del veterinario o productor.

De acuerdo con Napoles, “cuando una vaca tiene mastitis se deja hasta lo último en el ordeño y se puede usar una cánula para no tener que lastimar al animal. El proceso es un poco más lento, pero no hay tanta presión como la que ejerce la máquina de ordeño”.

El mismo profesional añade que a parte de la cánula, se tiene que hacer un tratamiento por medio del uso de dilatadores, que son como unos alambres que se introducen por el esfínter para que succione el pus que tiene, producto de la mastitis. (Lea en CONtexto ganadero: Extraordinario: nueva tecnología permite curar la mastitis)

Riesgos y consideraciones del uso de la cánula

• Si no se siguen protocolos de higiene estrictos, la inserción de una cánula puede introducir nuevos patógenos en el sistema mamario, empeorando la situación.
• La inserción incorrecta o forzada de una cánula puede causar daños físicos al canal del pezón, lo que podría resultar en cicatrices y obstrucciones permanentes.
• La efectividad del uso de cánulas depende en gran medida de la habilidad y experiencia de la persona que las aplica. Una mala técnica puede anular los beneficios potenciales.
• Las vacas que reciben tratamiento con cánulas deben ser monitoreadas de cerca para detectar cualquier signo de complicaciones o infecciones secundarias.

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