El matarratón se cosecha cuando la planta tiene alrededor de dos metros de altura. Es muy importante que el corte se haga de una manera determinada. Conozca cómo se corta, su secado y el almacenamiento.

Este tipo de vegetación, se usa como alimento ya que sus hojas y tallos tiernos son rico en nutrientes para los bovinos. Los tallos más gruesos se dejan en las calles del cultivo, pues poco a poco sufren un proceso de descomposición y son útiles como fuente de materia organice y minerales. (Lea: Establecimiento del matarratón en sistemas silvopastoriles)

El corte se el matarratón debe ser de la siguiente manera:

• A un metro de altura.  

• Con machete bien afilado.  

• Cortar de forma diagonal y de abajo hacia arriba para evitar que las plantas se desgarren. De esta forma, se logra una mejor cicatrización y el cultivo perdurará por muchos años.  

Para el proceso de secado y almacenamiento, en las épocas de pasto abundante y de buena calidad tal vez no se justifique la utilización del matarratón.

En estos casos, debe tenerse en cuenta que si el cultivo se deja sin cortar por más de tres o cuatro meses la planta crecerá mucho, se formarán tallos leñosos y se desperdiciará buena parte del follaje.

Una buena opción para este tipo de situaciones es cortar el matarratón con el intervalo adecuado y secarlo bajo estructuras simples.

Con un buen proceso de secado el material conserva su valor nutritivo y se puede almacenar por alrededor de seis meses. De esta manera se logra la mejor utilización del lote y se guarda el material para la época más difícil, es decir, en temporadas de sequía. (Lea: Conozca qué alimentos puede darle a sus animales en épocas críticas)

El proceso de secado se puede hacer sobre piso de tierra o cemento. El matarratón de cualquier forma, picado o sin picar, se esparce en capas delgadas y generalmente se debe mover unas cuantas veces en el día para favorecer su secado, el cual, en condiciones normales se obtiene en dos o tres días.

El proceso se puede hacer sin techo pero debe recordarse que en casos como los mencionados, este secado y almacenamiento se hace en epocas de abundantes precipitaciones.

Finalmente, existen diferentes formas de secado y una de esas puede ser bajo una estructura de PVC y cubierta con plástico, de tal forma que el material no se vea maltratado y pueda tomarse su tiempo para secarse, así como evitar ser ingerido por los animales que se encuentran alrededor de la finca. (Lea: El matarratón frente al suplemento comercial)

Fuente: Guía Sistemas Silvopastoriles. Aspectos teóricos y prácticos del CIPAV.