Un lactoreemplazante o lactoreemplazador es un sustituto de leche que se suministra a las crías que, por algún motivo, no pueden consumir la que produce su madre o una vaca nodriza. Antes de elegir el producto más adecuado, se deben tener en cuenta algunas recomendaciones.
De acuerdo con Daniel Werner y Gaby Adin, funcionarios de entidades adscritas al Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural de Israel, la diferencia entre los productos radica en la calidad y cantidad de los principales componentes, como la grasa y la proteína.
Esto es importante porque el crecimiento que los terneros consuman tendrá variaciones según las cantidades de proteína y energía, por lo cual el contenido de sus componentes es clave. (Lea: Conozca las ventajas y desventajas de los lactoreemplazadores)
Los porcentajes de ambos están relacionados, dado que un lactoreemplazador con elevados contenidos de proteína pero sin la energía necesaria para que el sistema digestivo de la ternera la metabolice resultará un proceso ineficiente y de alto costo para el productor.
Werner y Adin citaron trabajos realizados hace casi 20 años en Illinois (Estados Unidos) que concluyeron que las crías que recibieron productos con contenidos de proteína cruda moderados y altos contenidos de grasa engordaron.
En cambio, aquellos terneros que recibieron altos contenidos de proteína y bajos o moderados de grasa tuvieron un crecimiento acelerado sin acumulación de grasa. (Lea: Nodriza automática para alimentación de terneros con tecnología andina)
“Esta experiencia remarca la importancia de la formulación de lactoreemplazantes equilibrados”, señalaron los autores, agregando enseguida cuáles aspectos se deben tener en cuenta para elegir los lactoreemplazadores, entre los que están:
- Contenido de nutrientes que cubran los requerimientos.
- Contenido de nutrientes fácilmente digestibles.
- Composición de aminoácidos.
- Contenido libre de tóxicos.
- Contenido libre de antibióticos.
- Propiedades que aseguren el fácil manejo que permita la mezcla homogénea con baja velocidad de sedimentación, solubilidad en agua, composición uniforme durante el almacenamiento.
- Palatabilidad.
Más abajo, ofrecieron otras pautas sobre cómo elegir este tipo de productos teniendo en cuenta otros parámetros más allá de los componentes nutricionales del lactoreemplazador. (Lea: Estos son los 3 sistemas de crianza de terneros)
- Edad de los terneros: Crías menores de tres semanas no poseen igual capacidad de digestión que las mayores, por lo que se recomienda usar productos de máxima calidad hasta los 21 días y luego es posible el uso de productos de menos calidad. Al respecto, anotaron que siempre consultar con profesionales y asegurarse la cobertura de las necesidades de las terneras a lo largo de todo el proceso de cría.
- Origen del lacto remplazante y sus componentes: Se recomienda un mínimo de 85 % de proteínas de origen lácteo.
- Valor nutricional: En Israel los lactoreemplazantes poseen contenidos mínimos de 18 % de grasas y 23 % de proteínas. Deberá tenerse en cuenta que en climas fríos el porcentaje de grasa podrá ser mayor (suministro de energía para el mantenimiento de la temperatura corporal).
- En todos los casos, es recomendable usar el etiquetado de los productos para comparar y verificar los valores del producto, así como el tiempo que puede conservarse.
- Debe recordarse que la mejor manera de comprobar la calidad del producto es a través del seguimiento de los ritmos de crecimiento de las terneras.