Este problema afecta a un alto porcentaje de caballos en varias regiones del país, convirtiéndose en una enfermedad común que acarrea altos costos para los propietarios de los animales. Conozca cuáles son sus causas y cuál es su tratamiento. Según el médico veterinario Francisco Londoño, las causas por las cuales se presenta la falta de este nutriente en équidos varían con la edad y el sexo del animal, por lo cual es importante establecer primero estos 2 aspectos. En general, la deficiencia se atribuye al uso de pesebreras que reduce la exposición del caballo al sol, esencial para fijar calcio, y los altos niveles de moléculas en pastos como el kikuyo que limitan su absorción. (Lea: ¿Por qué no es recomendable dar silo a los caballos?) Londoño explicó que estas moléculas vienen de minerales como fósforo y magnesio, que ocupan los espacios del calcio: “En la sabana de Bogotá y en zonas de tierras hechas, el fósforo suele ser más abundante. Mientras que la relación en el caballo es de 1 y medio o 2 partes de calcio por una de fósforo, en los potreros hechos con fertilizantes, la relación aumenta a 6 por una de calcio”. En este sentido, este exceso de fósforo en los caballos adultos afecta la producción de hormona paratiroidea (PTH) y de calcitonina, que pueden provocar encarrillamiento, una deformación de todos los huesos pero especialmente los huesos planos de la cara. Esto también puede ocurrir por una alimentación desbalanceada, con un alto suministro de subproductos de granos como mogollas y salvados de trigo, que tienen una elevada cantidad de fósforo. (Lea: Uso de purgantes y vitaminas previene males en equinos) “En potros, se presenta la hipocalcemia que reduce la cantidad de vitamina D, causando baja producción de osteoblastos, las células que llevan el calcio a los huesos. Hay calcio pero no es transportado”, explicó. De otro lado, el médico veterinario señaló que la deficiencia de calcio ocurre en yeguas cuando hay grandes requerimientos del nutriente, especialmente en época de lactancia, cuando la madre lo suministra a la cría a través de la leche. “Cuando se baja el calcio y se eleva el magnesio, se dan las tetanias, cuando las yeguas se ponen rígidas, se caen y tienen tendencia a morir si no son tratadas oportunamente”, agregó Londoño. (Lea: Identifique las causas de la fatiga y sobreesfuerzo en equinos) Para el tratamiento, el experto aconsejó corregir las dietas con carbonatos de calcio u otras fuentes como la alfalfa, y suplementos vitamínicos. Asimismo, algunas empresas han desarrollado productos para elevar este nutriente. Por ejemplo, la empresa Nexentia del grupo Corona, que desarrolla su actividad de la mano del Grupo de Coloides de la Universidad de Antioquia, lanzó Forticaps, un carbonato de calcio con tecnología de micro encapsulación para prevenir la osteodistrofia fibrosa y mantener la salud en los huesos de equinos.