El comportamiento de los bovinos tiende a ser muy cambiante durante sus diferentes etapas de desarrollo, razón por la cual los productores deben tener en cuenta herramientas como el amanse desde los primeros meses de vida del ternero.
Adiestrar a un animal para moldearle su comportamiento desde los inicios del ciclo de vida es una de las tareas que debe volverse recurrente en las explotaciones ganaderas del país. Esta práctica no solo garantiza un mejor manejo de la actividad productiva, sino que también genera confianza y tranquilidad en los animales, que son quienes finalmente se encargan de producir leche o carne en el predio. ¿Conoce usted la importancia del amanse durante el preparto?)
Así es explicado en una conferencia por Diego Sánchez, médico veterinario y experto en transferencia de embriones, quien expone que el amanse es un momento que queda guardado en el cebero del animal, lo cual permite que no se le olvide.
“El darle comida al animal y amanse debe iniciar desde las primeras etapas de vida, pues así se evitan los traumatismos, debido a que el ternero recordará esto toda la vida”, comenta Sánchez.
Para el experto, es importante que se haga desde los primeros meses de vida del animal porque esto generará que el semoviente se comporte distinto en las siguientes etapas de vida de esa futura vaca o toro.
“Es un momento donde se impronta los terneros, lo que permitirá que sean animales mansos que logren tener una mejor relación con el ser humano”, comenta Sánchez.
En el caso del proceso de alimentación, el amanse les permite que sean animales que coman con tranquilidad en presencia de los humanos, logrando una mayor ganancia de peso y un mejor desarrollo de sus habilidades. (Lea: 2 medidas para lograr un óptimo desarrollo de la cría)
Doma racional
En el caso de la doma racional “es importante que usemos está práctica desde terneritos, pues va a ser mucho más fácil porque vamos a tener menos accidentes, lo que permitirá tener unos animales más tranquilos”, menciona Sánchez.
Esta herramienta es una forma de afianzar los lazos de afecto en los animales con los seres humanos, añade el experto.
Para llevar a cabo esta práctica se deben utilizar los lazos, una vara con un costal enrollado en la punta, cabezales suaves que no vayan a apretar ni atormentar al animal, sino que por el contrario sea un momento de relajación.
“Muchas personas hoy en día no amansan a los bovinos, sino que los tratan de obligar a realizar cierto tipos de acciones y esto no está bien, porque el amanse tiene que ser un acuerdo entre el animal y la persona que está encargada en operarlo o manejarlo”, describe Sánchez.
Esta es una herramienta que se debe llevar a cabo durante en las primeras etapas del ternero, pues de la crianza depende la producción de la futura vaca o toro, bien sea del tipo leche o carne”, concluye Sánchez. (Lea: 5 recomendaciones para la cría de terneros)