Cada vez más ganaderos están interesados en incursionar en ganadería sostenible. Uno de los primeros pasos es implementar División Sostenible de Praderas (DSP), un sistema de pastoreo racional que divide las áreas de pastos en varios potreros para que los animales roten periódicamente hasta completar un ciclo determinado. Es un sistema que da como resultado más animales en menos espacio.

En CONtexto ganadero presentamos estrategias clave y recomendaciones para ganaderos que buscan implementar un enfoque más sostenible en la división de praderas, de acuerdo con una publicación de la Universidad Santo Tomás sobre experiencias implementando este sistema.

1. Evaluación del terreno:

• Realizar un análisis exhaustivo del terreno para comprender la topografía, la calidad del suelo y las características climáticas.
• Identificar áreas propicias para la expansión y división de praderas, considerando la capacidad de carga del suelo.

2. Rotación de pastoreo:

• Dividir las praderas en parcelas más pequeñas para facilitar la rotación del ganado.
• Establecer un programa de rotación que permita períodos de descanso para la regeneración natural del pasto.

3. Manejo holístico:

• Adoptar un enfoque integral que considere no solo la cantidad de pasto sino también la salud general del ecosistema.
• Integrar prácticas de manejo del suelo, como la siembra de leguminosas para mejorar la fertilidad y la calidad del pasto.

4. Monitoreo continuo:

• Utilizar tecnologías de monitoreo, como drones o sistemas de telemetría, para evaluar la salud de las praderas.
• Ajustar las estrategias de pastoreo según las condiciones cambiantes y las necesidades del ganado.

5. Pastoreo rotativo:

• Implementar sistemas de pastoreo rotativo que permitan a los animales acceder a diferentes áreas en momentos específicos.
• Evitar la sobrepastoreo al limitar el tiempo de permanencia en cada parcela.

6. Infraestructura sostenible:

• Diseñar instalaciones que faciliten la movilidad del ganado entre parcelas y minimicen la compactación del suelo.
• Incorporar bebederos estratégicamente ubicados para reducir la concentración de animales en ciertas áreas.

7. Restauración de praderas:

• Considerar prácticas de restauración, como la siembra de especies nativas, para mejorar la diversidad vegetal.
• Rehabilitar áreas degradadas mediante técnicas de revegetación y control de la erosión.

8. Educación y colaboración:

• Capacitar al personal y compartir información sobre las prácticas sostenibles de división de praderas.
• Colaborar con instituciones agrícolas y expertos locales para obtener orientación y apoyo.

Al adoptar estrategias sostenibles en la división de praderas, los ganaderos pueden mejorar la productividad a largo plazo, reducir el impacto ambiental y promover el bienestar del ganado. La implementación consciente de estas prácticas contribuye no solo al éxito individual de las operaciones ganaderas, sino también a la salud general de los ecosistemas locales y globales.