Aprenda cómo elegir una metionina protegida ruminalmente, que puede ser una gran herramienta para mejorar la producción y la salud de las vacas de lecheras. Este organismo cumple en el organismo de los bovinos diversas funciones metabólicas que pueden contribuir a su rendimiento.

Euclides de La Vega, asesor nutricional en Colombia de la multinacional francesa Adisseo, señaló en una entrega anterior para CONtexto ganadero que la metionina es una fuente de proteína pura para las vacas y explicó a qué se refieren cuando se habla de aminoácido limitante.

«Los rumiantes tienen unos requerimientos de proteína, compuesta por fracciones más pequeñas, los aminoácidos. El más limitante en todos los sistemas de producción leche y carne es la metionina. Lo que hacemos es dar esa fuente pura para cubrir la necesidad y quitar la limitación», anotó.

De acuerdo con el artículo de la revista Nuestro Holando Nº 693, la metionina se identificó como el primer aminoácido limitante para la producción de leche en la mayoría de las situaciones de campo ya en los años 70. Desde ese momento se han publicado varios estudios sobre los requerimientos de metionina y lisina en vacas lecheras. 

Las recomendaciones sobre sus requerimientos publicadas por el NRC en 2001 todavía son aplicadas en tanto que investigaciones más recientes aconsejan niveles de metionina metabolizable cada vez más altos, según la importancia de los distintos roles metabólicos. (Lea: Descubra por qué la metionina protegida eleva la producción de leche)

La formulación de raciones considerando los aminoácidos metabolizables se ha usado fundamentalmente para aumentar la cantidad de proteína de la leche, pero no siempre se ha obtenido el resultado deseado. Esto ha causado resistencia hacia la formulación con reducción de PB y balanceado de aminoácidos.

¿Cómo elegir una metionina?

Ante las diversas fuentes que ofrece el mercado, el artículo indica que los suplementos de metionina se pueden dividir entre los que están basados en una matriz lipídica y los que son «ruminalmente protegidos». (Lea: Una solución para alcanzar el máximo potencial del ganado y aumentar la rentabilidad)

Los suplementos con base en matriz lipídica utilizan una fuente de grasa como portadora de la metionina. En general son más baratos que los productos realmente protegidos, tienen un porcentaje de metionina sensiblemente inferior y su liberación y absorción intestinal son bastante limitadas.

Por estas razones la mayoría de los nutricionistas y productores se inclinan por el uso de metioninas «protegidas», que usan una cápsula (coating en inglés) para evitar su degradación en el rumen. Los productos más conocidos a nivel mundial son Mepron® (Evonik) y otro producto con protección sensible al pH.

El texto aclara que los diversos productos que hay en el mercado usan métodos de protección diferentes. Mepron® se basa en la abrasión de la cápsula protectora y libera la metionina lentamente en el intestino, mientras que el otro producto es sensible a pH bajo y libera de golpe la metionina en el abomaso.

Esta liberación rápida de metionina por el otro producto con protección sensible al pH produce un pico muy breve de metionina en sangre, mientras que su liberación gradual en el caso de Mepron no produce un pico tan preciso, pero mantiene concentraciones altas de metionina en sangre en el tiempo.

No parece haber relación entre el pico alto y breve en el tiempo de metionina en sangre característico del otro producto sensible al pH y mayores producciones de proteína en leche. (Lea: Ventajas y problemas de los residuos de cervecería como alimento para el ganado)

El estudio más exhaustivo acerca de ambos productos es el metaanálisis publicado por Patton et al. (Journal of Dairy Science, 2010), en el que se analizaron 36 estudios científicos. Las vacas suplementadas con Mepron® produjeron más proteína láctea (37 g vs. 16 g) y más grasa (24 g vs. 2 g) que las suplementadas con OPSpH.

Las vacas que recibieron Mepron también aumentaron su producción de leche total (350 g/d) mientras que las alimentadas con OPSpH, mostraron una reducción (-220 g/d). Aunque las vacas suplementadas con Mepron aumentaron la proteína y grasa lácteas, e incrementaron la producción total de leche, se produjo un efecto de dilución.

Las implicaciones son importantes, ya que significa que el porcentaje de proteína láctea es un criterio insuficiente para elegir entre distintos productos del mercado. La producción total en gramos de proteína láctea o la leche corregida por energía son parámetros más fiables para comparar diversas fuentes de metionina.