El cargue en los predios de producción primaria y el descargue en las plantas de beneficio de los bovinos son etapas del pre-sacrificio cuyas implicaciones en el bienestar animal han sido poco estudiadas. Conozca más detalles.
En una investigación realizada y publicada por la revista Luna Azul, se expone que varios autores han considerado que, para los animales, puede ser aún más estresante el proceso del viaje. Por lo que dentro de los factores que dificultan el manejo de los bovinos durante el cargue y descargue están cinco. (Lea: Cómo minimizar el estrés que sufre el ganado en el transporte)
1. Infraestructura y diseño de las instalaciones basados en criterios arquitectónicos y no en el comportamiento bovino.
2. Presencia de estresores como ruido, contacto con personal extraño, condiciones climáticas adversas, entre otros.
3. Falta de capacitación y entrenamiento de los manejadores del ganado.
4. Actitudes agresivas de los manejadores que causan miedo y estrés a los bovinos.
5. Falta de indicadores y de un sistema de auditoría que permita construir una línea base para el mejoramiento del bienestar y el manejo de los bovinos en las plantas de sacrificio.
De acuerdo a la investigación, los indicadores de comportamiento basados en el animal, miden condiciones que están realizadas con malas prácticas de manejo, negligencia, abuso animal o equipos mal diseñados.
Estos tienen la ventaja de ser medidas prácticas, con las cuales se obtienen resultados inmediatos en cuanto a lo económico porque solo requiere formatos y capacitación adecuada, no invasivos porque se basan en observaciones sistemáticas; por tanto, no representan un estrés adicional para los bovinos.
La evaluación de los cambios de comportamiento de los bovinos relacionados con las interacciones con el hombre, pueden ser una herramienta importante para identificar riesgos operacionales en las plantas de sacrificio y para orientar la adopción de prácticas de manejo más eficientes, contribuyendo a garantizar estándares mínimos de bienestar animal en la cadena logística bovina. (Lea: ¿Qué debe tener un buen transporte para no generar estrés bovino?)
La investigación se realizó en una planta de sacrificio autorizada por el Instituto Nacional de Vigilancia de Alimentos y Medicamentos (INVIMA), en la que se evaluó el descargue de todos los camiones que ingresaron a la planta en un periodo de dos meses.
En el estudio se consideró como lote, el total de bovinos transportados por camión y se registró el tiempo de duración del descargue de cada lote, considerando como el lapso entre la apertura de la puerta del camión en la rampa de descargue, hasta el ingreso del último bovino al corral de recepción.
Se evaluaron 180 lotes, conformados por 1595 bovinos, de los cuales el 70.5% fueron machos y el 29.5% fueron hembras, procedentes de ocho departamentos de Colombia.
Los resultados muestran que el tiempo de descargue promedio por lote fue de 4.52 minutos. Los investigadores encontraron que el 76.7% de los lotes evaluados presentaron índices aceptables, es decir, con tiempos de descargues entre 0.5 y 1 minuto/animal y con ausencia de eventos conductuales, hasta más de 2 eventos/animal.
Entre los eventos conductuales que se presentaron con más frecuencia en todo el proceso fueron los resbalones, saltos y vocalizar. Todo esto, teniendo en cuenta que las prácticas de manejo que caracterizan la interacción hombre-animal fueron silbar, golpear y hablar.
Finalmente, los investigadores concluyeron que el descargue es una etapa estresante para los bovinos de abasto público, siendo de vital importancia que los transportadores y el personal encargado del manejo de los bovinos, estén informados sobre procedimiento adecuados y detalles de la llegada de los cambiones de ganado a la planta de beneficio, cuidando que el descargue procesa sin demora y con las mínimas dificultades.