La reconversión ganadera es la transformación del modelo ganadero tradicional en uno más eficiente en términos de producción de carne y leche. Conozca cómo puede hacer este cambio en su predio ganadero.

La reconversión ganadera es un sistema que genera riqueza y prosperidad para sus propietarios y para la comunidad, pues se hace una conservación constante de los recursos naturales. Con esta se pretende lograr una ganadería consciente de su responsabilidad ambiental, pues no se trata únicamente de cuidar el medio ambiente. (Lea: La reconversión ganadera un compromiso de las familias en la alta montaña)

El enfoque en el cual se basa esta reconversión permitirá un mejor retorno económico de la actividad ganaderas en el mediano y largo plazo.

Dentro de este proceso los sistemas silvopastoriles desempeñan un rol fundamental, pues asocian los pastos con una muy buena presencia de árboles y arbustos que con un adecuado manejo permiten una ganadería altamente eficiente, rentable y que conserva los recursos naturales, pues se asemejan a un hábitat como la selva original.

El objetivo es volver a crear, es decir, recrear el ecosistema selvático hasta donde sea posible, pues no es simplemente sembrar unos pocos árboles que le den sombra al ganado o que le sirvan a las aves para anidar. En este proceso es necesario que la ganadería se desarrolle bajo muchos árboles que con adecuado manejo, permitirán maximizar la producción de pasto y los beneficios de la actividad ganadera.

Los sistemas silvopastoriles forman parte de la práctica denominada Agroforestería, entendida en un sentido complejo que cubre los cultivos de ciclo corto, cultivos de mediano plazo, perennes, ganadería, por lo que es asociada con presencia significativa de árboles.

En este sentido, tenga en cuenta estas acciones para iniciar desde cero con los procesos de modelos silvopastoriles en su finca: (Lea: Diseño de sistemas silvopastoriles)

1. Análisis del suelo, basado en cada uno de los componentes.
2. Evaluación de la zona y la región en la que se encuentra ubicada la explotación ganadera.
3. Revisión de los árboles que pueden ser aptos para la siembra en el área determinada.
4. Elección de las hectáreas con las que se van a trabajar, por lo que inicialmente se recomienda probar en unas pocas áreas, de tal forma que se puedan analizar los beneficios y costos.
5. Una vez realizado esto, hacer la inversión de la siembra de los árboles en la ganadería, para que así se aumente la rentabilidad y productividad.
6. Estar constantemente revisando cada uno de los procedimientos que se realizan con la implementación de sistemas silvopastoriles, de tal manera que se convierta en un modelo perdurable.

Finalmente, se considera que este es un proceso que debe ser analizado por cada uno de los productores colombianos, para que sea utilizado de forma progresiva y así se puedan ir viendo los beneficios que trae tanto para el ambiente, como para el ganadero. (Lea: Nama: el proyecto que busca reconvertir la ganadería nacional

Fuente: Guía Sistemas silvopastoriles. Aspectos teóricos y prácticos del CIPAV.