El manejo adecuado de las vacas lecheras ayuda a preservar su salud y permite que estas expresen su comportamiento natural como especie, lo que las mantiene tranquilas y reduce el índice de lesiones y mortalidad.
Desde el proyecto local de Granada (Meta) recuerdan cinco consejos para criar, de la mejor manera posible, una vaca de leche y así obtener mayores beneficios.
La alimentación
Lo primero, es darle una alimentación de calidad. La dieta que se le aporta a la vaca lechera es fundamental para mantenerla sana y productiva. Debe recibir granos, ensilaje y heno de la mejor calidad, así como alimentos verdes que ayuden a maximizar la producción de leche.
Además de la alimentación, las vacas de leche deben tener acceso a agua limpia y fresca en todo momento. Las vacas pueden tomar hasta 30 litros de agua a diario. Durante los meses de verano, el volumen que ingieren puede alcanzar los 50 litros al día. (Lea en CONtexto ganadero: Cría y levante de terneras, aspectos fundamentales de la rentabilidad)
Cuidado de los pezones
Un segundo consejo se refiere al cuidado de los pezones. Cuando se trata de ordeñar una vaca, la ubre es la parte más importante y aunque no muchos lo sepan, es propensa a presentar enfermedades. Para prevenir infecciones, más conocidas como mastitis, es importante mantener higienizada a la vaca.
Después de ordeñarla, el esfínter del pezón se encuentra abierto y es el momento en el que las bacterias pueden llegar a ingresar. Para ello es importante limpiar y aplicar un desinfectante al pezón luego de cada ordeño.
Los productores además deben tener presente que es necesario que la vaca tenga un pezón limpio y desinfectado. Ahí es clave, que los hatos adquieran productos tanto para el sellado como para el presellado que se acondicionen a la piel y que se tenga en cuenta que no todos estos productos están diseñados para el ordeño, se deben adquirir productos certificados.
Los espacios
En tercer lugar, se recomienda mantener los animales en un espacio adecuado. Su refugio, así como la zona donde se alimenta, la estancia y el ordeño deben estar lo más limpios posibles y debe circular el aire. La ropa de cama que se ha ensuciado con estiércol debe ser reemplazada todos los días.
Según el portal certifiedhumanelatino.org, el ambiente donde se cría el ganado no debe causarle molestias físicas, térmicas o emocionales y ha de permitir que los animales se comporten de forma natural. Necesitan tener total libertad de movimiento para acostarse, levantarse, voltearse, lamerse y estirar sus extremidades. El comedero debe mantenerse limpio, ser de fácil acceso y disponer del espacio suficiente para que todos los animales se alimenten al mismo tiempo. (Lea en CONtexto ganadero: Ventilación de los establos, clave en la productividad y bienestar animal)
La sala de ordeño debe estar siempre extremadamente limpia para reducir el riesgo de infección; las máquinas de ordeñe deben calibrarse frecuentemente y cuidarse bien.
La salud
El cuarto consejo hace referencia a tener todas sus vacunas al día ya que esto ayudará a prevenir enfermedades y evitar riesgos. Esto ayudará a prevenir enfermedades y evitar riesgos. Hay que tratar este tema con un veterinario, ya que ciertas vacunas pueden provocar abortos inesperados, diarrea y demás síntomas.
Para que se garantice la buena salud de las vacas lecheras se ha de desarrollar un Plan de Salud Animal (PSA), que debe actualizarse periódicamente según la orientación de un veterinario, y monitorear constantemente el desempeño de los animales.
Observar la incidencia de enfermedades de producción, enfermedades infecciosas y heridas causadas por el alojamiento o un manejo inadecuado. Los animales que se enfermen o sufran lesiones deben recibir tratamiento rápido y, cuando sea necesario, se debe buscar asistencia veterinaria.
El ordeño
Por último, pero no menos importante está el tema del ordeño. Se estima que la mayor parte de las vacas lecheras necesitan ser ordeñadas dos veces al día. Algunos granjeros optan por ordeñarlas a mano y otros a máquina. Mantener limpio el equipo de ordeño, asegura leche higienizada y fresca. (Lea en CONtexto ganadero: Claves para realizar un adecuado ordeño mecánico)
Los objetivos de un buen programa de gestión del ordeño son optimizar la eficiencia del ordeño y la calidad de la leche. El estrés mínimo de las vacas durante el traslado a la sala y durante el ordeño combinado con procedimientos de ordeño consistentes contribuyen a la producción máxima y disminuyen la aparición de infecciones intramamarias. Ordeñe siempre los pezones limpios, secos y bien estimulados y asegúrese de que el equipo de ordeño esté bien desinfectado y funcione correctamente, comenta una publicación del el portal edis.ifas.ufl.edu