Esta enfermedad transmitida por las garrapatas, aunque tiene tratamiento clínico, puede afectar la rentabilidad del hato ganadero si no se interviene a tiempo. Conozca cómo hacerlo.

La babesiosis bovina es una infección parasitaria transmitida por garrapatas que causa significativa morbilidad y mortalidad de los animales. Esta enfermedad transmitida por artrópodos es la más importante del mundo y afecta principalmente a los semovientes que están ubicados en las regiones tropicales y subtropicales. 

De acuerdo con un estudio realizado por el Departamento de Parasitología de la Universidad Nacional Autónoma de México, en cabeza de Juan Antonio Figueroa Castillo, esta infección la fiebre, la anemia y la ictericia son las formas más fáciles de detectar la enfermedad en el predio. (Lea: Garrapatas y moscas: los ‘chikungunya’ de los bovinos)

“La infección generalmente está acompañada por la presencia de las garrapatas y su transmisión natural es por alimentación de ninfas y garrapatas adultas infectadas. Los síntomas se comienzan a ver en el animal 2 o 3 semanas después de la infestación”, señala el documento.

Por su parte, Efraín Benavides Ortiz, doctor en Medicina Veterinaria de la Universidad Nacional de Colombia y docente de la Universidad de La Salle, explicó que las condiciones ecológicas del trópico colombiano proveen un hábitat ideal para la multiplicación de esta clase de artrópodos y, por ende, para la propagación de este tipo de enfermedades infecciosas en el ganado. (Lea: 14 enfermedades sin control oficial atacan al ganado en Colombia)

“Lo más importante es implementar en el predio un manejo integrado de plagas para usar en conjunto diversas herramientas y estrategias químicas y no químicas de control para lograr la mayor eficiencia en su combinación, manteniendo los parásitos a niveles inferiores a su umbral de daño”, acotó Benavides Ortiz.

Oscar Jaime Betancourt, director científico de sanidad animal en Novartis de Colombia, aseguró que cuando se presente esta enfermedad en el predio lo más recomendable es que el productor le suministre al bovino un buen antibiótico. (Lea: (Lea: Preste atención a las enfermedades bovinas más recurrentes en verano)

“Cuando un semoviente presente babesiosis, se le puede aplicar una sola inyección de 3.0 mg de Ganaseg por cada kilogramo de peso del animal para efectuar una curación clínica. Si se hace necesario, se pueden administrar tratamientos repetidos a intervalos de 24 horas alternando el sitio de la inyección de un lado a otro”, concluyó Betancourt.

En conclusión, la babesiosis bovina es una infección a la que si no se le pone cuidado puede afectar seriamente la productividad y economía del hato, por tal motivo es aconsejable realizar un tratamiento efectivo para que esta enfermedad no se propague en el predio.