El retirador automático es un dispositivo que corta el vacío cuando un sensor detecta la finalización del ordeño para posteriormente retirarlo. Este sistema ha avanzado en los años recientes para brindar mayor confort al operario y reducir el riesgo de sobre ordeño de la vaca.

Como describió Castro Pontón, el retirador automático (RA) ha sido incluido en los hatos lecheros para eliminar operaciones de rutina en esta tarea, con lo que se incrementa el rendimiento, se reduce el tiempo del ordeño, se manejan más vacas y se evita el sobre ordeño.

El retirador está regulado según el flujo de leche y el tiempo, y está constituido por una caja de control, un sensor de flujo, un temporizador, una válvula de corte del vacío y del sistema de retirador de pezoneras. (Lea: Estos son los ‘gadgets’ ideales para un buen ordeño)

Su uso en ganaderías de Nueva Zelanda y Australia se ha elevado, pasando de 28 a 40 % de las granjas lecheras australianas entre 2004 a 2009. Los RA se basan en la separación de las unidades cuando se ve reducido el flujo de leche bajo un nivel preestablecido en kg/min.

El autor destacó varios estudios que han comprobado que el ajuste de los RA de 0,2 a 0,4 kg/min influye en la duración del ordeño y mejora el rendimiento, pero no tiene efectos negativos en la producción o la salud de la ubre, sin alterar la incidencia de mastitis clínica y subclínica.

Por otro lado, un artículo de DeLaval reveló que numerosos estudios han comprobado que existe una correlación entre el sobre ordeño y el flujo lento de leche. (Lea: Estos son los componentes en un sistema de ordeño mecánico tradicional)

“Un ordeño de manera consistente se puede realizar teniendo un sistema de retirado automático en un establo lechero y la consistencia puede ayudar a entrenar vacas para una bajada de leche más rápida y con alto flujos de leche”, precisó.

El retirador automático es diferente en cada finca

De acuerdo con el Dr. Doug Reineman de la Universidad de Wisconsin, los parámetros de los retiradores automáticos son diferentes en cada finca. Por ejemplo, una granja con 3 ordeños al día tendrá flujos de leche más altos al momento de retirado para reducir el impacto en la punta del pezón.

En algunos retiradores automáticos, existe un ajuste de retraso, que es el tiempo que toma para cerrar el vacío después de que se alcanza el punto final de leche. La mayor parte de los ajustes de fábrica están entre 15 a 30 segundos, que significa demasiado largo.

El objetivo principal es tener el ajuste alrededor de uno a tres segundos para que las unidades se retiren más rápidamente. Los ajustes se deben hacer lentamente o las vacas se opondrán al cambio. (Lea:Conozca cómo funciona el carro-ordeño creado por colombianos)

En una prueba implementada en Estados Unidos, los hatos empezaron con un tiempo de retiro de la unidad promedio de 7.2 minutos y a la fecha se están promediando menos de 4.5 minutos en hatos con promedio de producción de leche arriba de 40 kilogramos / día / vaca.

Varios de los establos están ahora en menos de cuatro minutos por máquina. Con los ensayos se han hecho cambios cruzados y cada vez los resultados son positivos cuando son acortados y negativo cuando se han alargado, los resultados han sido muy consistentes.

En la mayoría de los establos, están ordeñando más rápidamente, y por consiguiente las puntas de los pezones son más saludables, sus cuentas de células somáticas son más bajas y las vacas se ordeñan de una manera tranquila.