Escalonar el levante de novillos es una solución rentable para la economía del predio bovino. Acá le explicamos por qué y cómo debe hacerlo.
Además de aprender a manejar y mejorar las pasturas, trabajar en el mejoramiento genético, ser mas amigables con la naturaleza, los ganaderos deben saber que uno de los principios más importantes en cualquier negocio es el flujo de caja, factor importante para poder tener estabilizar sus ingresos, administrar los egresos y hacer de su predio una verdadera empresa.
La clave es sencilla: saber cuanto y cada cuando se produce, eso le permite detectar posibles falencias y aprovechar mejor las eventuales opotunidades.
En la ganadería lechera es común encontrar dificultades en el sistema por producción, comercialización y manejo, elementos que hacen que aunque el dinero se vea a diario, no esté garantizado un flujo constante, pues siempre dependerá de que nada altere la producción diaria de las vacas, por ello se le considera de corto plazo. (Lea: Levante de vacas y toros, negocio para ganaderos fuertes)
Situación distinta a la que se da en los procesos de ceba. De acuerdo con Jorge Humberto García, director del programa ‘Ganadería Productiva y más Limpia’, lo más importante es cuidar la alimentación de los semovientes ya que de ello dependerá lograr estabilizar los ingresos.
“El aumento de gramos día por animal, que también debe ser permanente, no lo puedo medir a diario. Es un resultado que, como gran cosa, lo mido mensualmente si tengo la báscula o al final del proceso, si no tengo cómo realizar el seguimiento. Esto hace que no veamos con la misma intensidad los resultados que obtenemos en el proceso ganadero de ceba”, explicó García.
Comúnmente, en el país se encuentran productores que manejan los programas comprando animales de menor peso y deben esperar hasta 2 o 3 años para sacar estas reses al mercado. Estos sistemas no viven del negocio, porque un sistema que dure tanto tiempo para tener un flujo de caja no resistiría. (Lea: La fórmula para levantar vacas)
“Estas personas, generalmente, tienen otro apalancamiento para sostener el proceso y así poder cubrir los gastos en el largo transcurso del tiempo, entre compra y venta”, explicó el director de programa ‘Ganadería Productiva y más Limpia’.
Producción a escala, solución rentable
Por tener mejores ganancias de peso por animal y área productiva, cada vez más productores optan por manejar un grupo de ejemplares de acuerdo a sus pesos en escala, o escalera, lo que en muy corto tiempo y de manera continua les puede generar los primeros ingresos y con esto podrá realizar los reemplazos necesarios con reses menores.
“Al ingresar los animales más pesados, de 300 kilos, estos con los aumentos logrados en un programa de 500 o 650 gramos, (15 o 20 Kilos), a los 2 meses en promedio estos semovientes están llegando a los 340 kilos. Al venderlos ya hay ingresos, con los que el productor puede adquirir más reses de 180 kilos, quedándole flujo de caja para su economía”, apuntó Jorge Humberto García. (Lea: Aprovechan plaga para engordar ganado)
Por su parte, Julián Gutiérrez, funcionario de la Oficina de Investigaciones Económicas de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, señaló que el flujo de caja se genera cuando en la ganadería de ceba se escalonan las edades de los animales.
“Es importante mantener siempre la capacidad de carga en la explotación ganadera, porque sacar todos los animales al mismo tiempo no es buen negocio. Escalonar la ceba es bueno para la rentabilidad del hato y tener animales de varias edades, ayuda a la economía del predio”, acotó Gutiérrez.
Lo importante es que el ganadero conozca muy bien la alimentación que les suministra a sus animales, pues de esto dependerá lograr tener un flujo de caja estable que permita organizar los ingresos y egresos de la empresa.