Los productores tienen varias opciones de siembra en los sistemas silvopastoriles, una de estas es la directa mediante la preparación mecánica del terreno. Para la especie de leucaena, es importante velar por una serie de aspectos para que la cosecha sea exitosa.

Para que la siembra de leucaena se realice de una amanera adecuada, los productores deben seguir unos lineamientos que garantizan unos resultados excelentes. Por tal razón, son muchos los factores que juegan en contra y a favor de este procedimiento, que en algunos casos se ejecutan por medio la preparación mecánica del terreno.

Siembra directa con preparación mecánica del terreno

La preparación del terreno tiene como finalidad el eliminar la cobertura vegetal indeseable y crear las condiciones adecuadas para un buen desarrollo de la leucaena y el pasto. En este proceso se utilizan tractores, rastras, rastrillos y subsoladores de diferentes tipos y dimensiones que cumplen un papel importante en la tierra. (Lea: Actividad agrícola con ganadería hace más efectivo el manejo de las malezas)

La maquinaría que se utiliza dependerá de las condiciones de cada lote, pero también de la disponibilidad de equipos, operarios y de costos, teniendo claro cuál es el objetivo, es decir, aflojar, descompactar, desmoronar y airear el suelo, sin voltearlo ni convertirlo en polvo.

Para que este tipo de máquinas funcionen correctamente y generen beneficios en los terrenos, los operarios o encargados deben hacer un control y ajustes de las condiciones de la maquinaria, de tal forma que no vaya a tener dificultades en los procesos.

Durante este procedimiento, el trabajo de subsolado debe alcanzar por lo menos 40 centímetros de profundidad.

Luego haber preparado el suelo, se recomienda la construcción de caballones o surcos elevados con una dimensión entre 20 a 30 cm de altura, en los cuales se sembrará especie, en este caso la leucaena. (Lea: Cómo hacer que la leucaena produzca más)

Estos caballones tienen un objetivo claro, y es que al llegar las lluvias, la semilla no se vea afectada por el encharcamiento ni el arrastre que en varias ocasiones suelen presentarse en los predios agrícolas y ganaderos.

En los casos de preparación mecánica del terreno es común una distancia entre los surcos de 1.5 metros.

Para la siembra de la leucaena, se puede hacer por medio de sembradoras mecánicas o de forma manual, siempre teniendo presente que la semilla no quede a más de 2 centímetros de profundidad. En la siembra manual se recomienda 3 a 4 semillas con una distancia de 40 centímetros. (Lea: Conozca todo lo que debe saber de la siembra directa manual de leucaena)

Finalmente, es por esta razón que cuando se utiliza sembradora mecánica, esta debe calibrarse de forma adecuada, para que así siembre de 10 a 15 semillas en cada metro lineal de surco.